Ameal y Riquelme dialogaron con el cuerpo técnico que encabeza Miguel Russo, en el comienzo de una pretemporada clave para buscar el objetivo principal del próximo semestre, que es la séptima Copa Libertadores.
Es habitual que Riquelme esté todos los días en el predio de Ezeiza, pero no así el presidente boquense, quien tiene su despacho en Brandsen 805, en La Bombonera.
Desde las 8, los futbolistas trabajaron bajo las órdenes del preparador físico Adrián Lanata: primero estuvieron en el gimnasio y después hicieron tareas físicas en una de las canchas principales. Almorzaron a las 12 y una hora más tarde partieron hacia un hotel del barrio porteño de Monserrat.
Por la tarde, el plantel realizará una práctica futbolística en el predio Pedro Pompilio, para luego cenar y dormir nuevamente en el hotel que es utilizado como burbuja sanitaria.
Hasta el próximo fin de semana, ésas será la rutina diaria del plantel. Para dentro de diez días, el cuerpo técnico tiene programado empezar a jugar algunos partidos amistosos a puertas cerradas.
Además del grupo de 30 futbolistas que realizan la pretemporada, también se entrenan Julio Buffarini, Leonardo Jara, Emmanuel Mas y Franco Soldano, cuyos vínculos vencen el 30 de junio y ya saben que no seguirán en Boca. Estos jugadores no entrenarán en el turno tarde ni formarán parte de la burbuja sanitaria.
En cuanto a los refuerzos, los directivos del club de la Ribera siguen en la búsqueda de los delanteros Roger Martínez y Franco Di Santo, y del lateral peruano Luis Advíncula.
Hace unos días Fernando López, representante del colombiano Roger Martínez, quien juega en el América de México, reconoció que el delantero tuvo contactos con Riquelme, pero que su proyecto era jugar en Europa.
Sin embargo, los integrantes del consejo de fútbol “xeneize” harán en las próximas horas una nueva oferta por el 50% de su ficha en una suma cercana a los 6.500.000 dólares.
En cuanto al marcador de punta derecha Luis Advíncula, hay optimismo para concretar su llegada, aunque el defensor peruano ayer ascendió a la primera división de la Liga española con el Rayo Vallecano.
El defensor peruano tiene arreglado de palabra su contrato con la dirigencia de Boca, y ahora hay que esperar para saber en cuánto lo cotizaría el club español. El futbolista no es titular en el equipo madrileño, y ayer ingresó en los últimos minutos en la victoria por 2-0 ante Girona, que le sirvió apara ascender a LaLiga.
Y por último, aunque siguen las diferencias económicas, Boca insistirá por Di Santo, por el cual ofreció 2.500.000 dólares y se tratará de mejorarle el sueldo, ya que lo que gana el delantero en San Lorenzo es superior a lo que le pagarían en la entidad “xeneize”.
Hace cinco días que no hay contacto entre los dirigentes de ambos clubes, pero según le dijeron a Télam allegados a la secretaría de fútbol boquense, el club azulgrana tiene una deuda muy importante con el 9 que a Miguel Russo le interesa. Por ello, creen que su llegada se podría concretar esta semana.
El debut oficial de Boca en el próximo semestre será ante Atlético Mineiro de Brasil, el martes 13 de julio en La Bombonera, en el partido de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores.
FUENTE: Agencia de Noticias Tèlam