
En pésimas condiciones de vida, de salubridad e higiene se encuentran unas 20 familias de la Chacra 246 de Posadas (Jauretche e Ituzaingó) y les urge ser relocalizadas, un largo reclamo que aún no encuentra salida.
“Recorrimos la chacra con la comisión barrial, casa por casa, familia por familia, y escuchamos los testimonios de dolor, indignación y exigencias legítimas”, se señaló desde la oficina de prensa del PAyS al frente de la caminata para tomar registros fotográficos de la situación.
La mayoría de las personas contaron que residen en ese lugar desde hace más de 20 años y las consecuencias quedaron a la vista: niñas y niños lactantes enfermos, pacientes oncológicos, bebés que nacen enfermos por el contexto de contaminación durante la gestación, olores nauseabundos, ya que detrás de las casas hay desagotes cloacales que provienen de las chacras 245 y 132.
Laura Benítez integrante de la comisión de tierras de la chacra volvió a insistir en la urgencia de mudarse porque donde están se agravan las condiciones de padecimientos.
“Estamos desesperados por tener un lugar para vivir en mejores condiciones y poder salir adelante. Vivimos detrás de la casa de mi mamá, respiramos aire contaminado y no podemos seguir así”, fue el pedido de Sonia Salinas cuya familia vive de changas y está conformada por su esposo, Omar Bairos, y cinco hijos de 11 años a nueve meses.