La semana pasada, el Directorio del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) comunicó que controlará la calidad de la yerba canchada importada, al aprobar el “Régimen de Información y Control de Yerba Mate Canchada Importada”, junto a otras medidas orientadas a fortalecer la calidad del producto.
Así, quienes ingresen el producto a la Argentina deberán informar al INYM el destino de la materia prima, consignando el domicilio donde quedará en resguardo, fecha de ingreso al país, tipo de producto y cantidad en kilogramos.
El producto deberá permanecer en el lugar declarado hasta tanto el INYM tome muestras y pueda realizar análisis fisicoquímico y microbiológico para determinar su aptitud; esto, siguiendo los lineamientos del Reglamento de Control de Calidad de Materia Prima de Yerba Mate aprobado por Resolución 11/2017, y sus modificatorias.
Sin embargo, desde el sector Industrial dentro del Instituto, plantearon que la decisión fue “apresurada” debido a que el documento llegó al Directorio sin previo análisis de las entidades relacionadas con los procesos de importación del producto, por lo cual solicitaron un aplazamiento de la votación. Además, reconocieron que uno de los principales inconvenientes sería la cantidad de días que se guardará la yerba canchada importada esperando los resultados de los análisis de control.
En relación a esto, Raúl Ayala Torales, director titular por Industrias en el INYM, comentó a PRIMERA EDICIÓN que: “Se están analizando los términos de la resolución porque se introdujo en la última reunión del Directorio sin que el texto pase por las entidades, como son la cámara de molineros de la zona productora, también de Corrientes, las asociaciones de secaderos y las cooperativas que son quienes importan eventualmente yerba mate canchada”.
“Como el texto entró al Directorio sin análisis previo, lo que hizo la Industria fue solicitar un aplazamiento de la votación de dicha resolución. El malestar que se creó fue porque la resolución se presentó al Directorio sin haber sido analizada por los sectores más interesados que son los exportan. En eso estamos ahora”, explicó y agregó: “En base a eso se verá si amerita una presentación judicial, teniendo en cuenta que ese es el último recurso que tiene un afectado frente a una resolución inconsulta”.
“En este momento cada entidad tiene el texto de las resoluciones y así se verán los pasos a seguir. En las próximas semanas, las entidades afectadas solicitarán un pedido de reconsideración, si es que eso fuera necesario, o directamente recurrir a la Justicia. Hay que esperar unos días, hasta que las asociaciones hagan los análisis del texto, para saber cuáles serán los caminos a tomar”, remarcó.
Complicaciones del proceso
Al ser consultado sobre las complicaciones que podría generar la cantidad de días que se debe esperar hasta que finalicen los procesos de control de calidad, Ayala Torales contestó: “Por supuesto que eso sería un problema. Una vez que la yerba canchada ingresó al país, el órgano de control, como pasa con cualquier producto alimenticio es el SENASA, que verifica que el producto cumpla, primero, con las normas del MERCOSUR y, segundo, con las normas del código alimentario argentino”.
“Además, ya hay un reglamento de secanza que indica cuáles son los requisitos que debe tener la yerba canchada. Y de alguna manera se discrimina a los productos, porque una vez que esa yerba mate canchada entró a un depósito lo único que la diferencia de una yerba argentina es la etiqueta”, indicó y se preguntó: “Entonces ¿por qué vamos a controlar solamente la yerba canchada importada si al lado hay una pila de bolsa de yerba canchada argentina, que podría tener los mismos problemas, y no es sujeto a esos análisis?”.
Al mismo tiempo consideró que “el problema es que los análisis duran entre 15 a 20 días, entonces en esos días esa yerba canchada está estancada, por decirlo de alguna manera, hasta que no esté el resultado del análisis. Eso tiene un costo financiero industrial, porque el que compró la yerba canchada, porque la necesita usar, tiene que esperar hasta que esté el informe del análisis”.
A su vez, “si el resultado del análisis arrojara un resultado sospechoso o no acorde con las normas, corresponde una contraprueba, entonces el tiempo se estira a un mes en custodia del producto esperando que el laboratorio emita los resultados”, completó.
En este sentido opinó que “la resolución se sacó a votación en forma apresurada, a los efectos de impedir, dificultar, molestar, a la importación de yerba mate”.
“En los últimos meses, es de público conocimiento, hubo escasez de hoja verde, lo que llevó a una elevación desmedida del precio de la yerba mate canchada. Eso motivó que se importara yerba, porque resultaba más barato traerla de afuera. Además con la salvedad de que era todo dentro del MERCOSUR y eso es como si fuera nacional en relación al pago de impuestos y demás, las normas del MERCOSUR se hicieron para eso”, argumentó.
Por ello, el Director representante de la Industria en el INYM, subrayó que “la medida busca limitar o poner trabas a la importación de yerba mate. Pero, en este momento, eso es algo innecesario porque el Gobierno paraguayo ha dictado una cantidad de medidas para no exportar más yerba mate, porque les está faltando a ellos. Tampoco se está trayendo yerba de Brasil, porque los propios importadores pusieron un límite por las normas de calidad, ya que la yerba brasilera no es del gusto argentino”.