El turismo en la provincia se destaca por saber aprovechar la naturaleza pura, proponiendo, facilitando y acercando el contacto estrecho de las personas con las maravillas que pueblan la tierra misionera.
Uno de los lugares donde más se puede apreciar esto es en el Parque Provincial Moconá. Éste se encuentra dentro de la Reserva de Biosfera Yabotí en el municipio de San Pedro, a unos 337 kilómetros de Posadas, con una superficie aproximada de más de 250 mil hectáreas.
Si bien el camino hasta el lugar puede resultar un tanto largo, el trayecto previo forma parte de esta experiencia única. El visitante comienza a disfrutar de la naturaleza que rodea el paisaje desde que inicia la ruta que une El Soberbio con el Parque Provincial Moconá, pudiendo acceder a diferentes miradores con vistas espectaculares sobre el río Uruguay.
Llegar a los saltos es muy sencillo. Saliendo desde El Soberbio, se debe tomar la ruta nacional 2 durante poco más de 60 kilómetros, hasta llegar a la amplia playa de estacionamientos del parque.
Luego, se deben recorrer otros 1.200 metros hasta el embarcadero “Piedra de Bugre”, donde se abordan los botes que permiten conocer y recorrer los Saltos. Vale aclarar que esta es la única manera de observarlos.
El Gran Salto Moconá, que significa “el que todo lo traga” en lengua guaraní, es un cañón de tres kilómetros de largo, cuya principal particularidad es que la caída del agua se da en forma longitudinal al cauce del río, y no transversal como la mayoría de las cataratas del mundo.
Observar de frente los Saltos del Moconá resulta un espectáculo imponente y único en el mundo, no sólo por la naturaleza que despliega toda su belleza sino además, por la experiencia de navegar en las barcazas que permiten vivir la experiencia de una manera insuperable.
Senderos
Otra de las alternativas que ofrece el Parque Provincial es la de sumergirse de lleno en la naturaleza, gracias a dos senderos que se adentran en la selva y que pueden recorrerse en cualquier horario del día.
El Chachi, de dificultad baja, tiene una extensión de 1.800 metros en los cuales se pueden encontrar un gran mirador con vista al río y un árbol gigante de 300 años.
Luego está el Sendero de la Gruta, de unos 1.200 metros, con una dificultad media-alta, que se destaca por una gruta con una pequeña caída de agua.
Recorrer los senderos y picadas permite apreciar cómo conviven en armonía la espesa vegetación, con abundante presencia de helechos arborescentes, matas de tacuara y añosos árboles. También se pueden llegar a divisar variedades de aves y mamíferos.
El río fluye e influye
Un aspecto a tener en cuenta a la hora de programar una visita a este sitio, es que la visibilidad de las cascadas depende directamente del caudal del río, por lo que no todas las épocas son adecuadas para visitarlas.
La caída promedio ronda entre los 5 y 8 metros, aunque si el clima es favorable puede llegar a superar los 10 metros. También se puede dar el caso contrario, en el que el río esté muy crecido y la caída esté por debajo de los 5 metros. Aunque existe un peor escenario, ya que cuando el caudal del río supera los 7 metros, directamente no está permitido navegar.
El acceso al parque también depende de la altura del arroyo Yabotí, si el nivel de éste es bajo, se puede acceder sin problemas, caso contrario el parque se encontrará deshabilitado hasta que baje el caudal.
La información del estado del caudal y si el parque se encuentra abierto o no, está disponible y actualizada constantemente en la página oficial: www.saltosdelmocona.tur.ar.
Precio
Tarifas de ingreso al parque: menores de 6 años no abonan; chicos de 6 a 12 y jubilados $25; misioneros $50; nacionales $150 y extranjeros $250. Las lanchas salen desde las 9 horas y hasta las 16.45. Las tarifas son diferenciadas, siendo de $350 para residentes de la provincia, $650 para turistas nacionales y $900 para extranjeros.