La medida de fuerza de esta semana será de 24 horas y, según adelantaron desde la Central, afectará el funcionamiento de los hospitales y centros de atención primaria de la salud (CAPS) de la provincia.
“El mandato de las bases es que la medida de acción directa crezca en forma progresiva cada semana, por lo que la próxima convocaríamos a un paro de 48 horas, luego de 76 y así sucesivamente”, anticipó el dirigente Juan Pasaman.
En tanto, indicó que organizan una movilización provincial para la primera semana de septiembre.
Son tres los reclamos que llevan adelante los trabajadores de la salud desde principio de este año: la unificación del régimen laboral para todos los trabajadores de Salud, lo que significa el pase a planta de todos los contratados y becados, incremento salarial y el pago del adicional del 60% que perciben otros estatales de otros sectores pero no los de Salud.
En el marco de la conciliación obligatoria sólo se dio un paso en el primer reclamo, pues “Salud Pública ofreció una recategorización que beneficiaría a 450 trabajadores, por lo que esta medida beneficiaría al 4,5% del recurso humano del sector que es de 10.000 trabajadores. Respecto al segundo punto, el aumento salarial, nos dijeron que elevaron una propuesta al Gobernador pero aún no tuvieron respuesta por lo que no se avanzó nada. Lo mismo ocurre con el adicional del 60% sobre el que tampoco hubo ninguna respuesta”, indico Pasaman a PRIMERA EDICIÓN.