“Yo no estoy siendo investigado, mis hijos tampoco, pero si hay algún error cometido obviamente voy a pagar la cuenta. Esta investigación duele en el corazón porque tenemos un fuerte compromiso contra la corrupción“, dijo Bolsonaro en un video enviado anoche a parlamentarios aliados.
El escándalo involucra al policía ex militar Fabricio Queiroz, ex asesor parlamentario y chofer oficial hasta octubre del diputado provincial Flavio Bolsonaro, hijo del presidente electo, en la Asamblea Legislativa de Rio de Janeiro.
La familia Queiroz era asesora oficial de los Bolsonaro desde hace dos décadas. La hija del chofer fue asesora hasta octubre del presidente electo en su oficina parlamentaria de diputado en Brasilia.
En el marco de la Operación Lava Jato, que investiga a 10 parlamentarios de la Asamblea Legislativa de Rio, el Consejo de Control de Actividades Financieras (Coaf) detectó movimientos de 400.000 dólares sospechosos en la cuenta de Queiroz en 2016 y 2017.
Un cheque de 24.000 reales (unos 6.000 dólares) fue depositado en la cuenta de la esposa de Bolsonaro, Michelle Bolsonaro.
Queiroz, amigo de Bolsonaro desde 1984 y su empleado en los cargos públicos que ocupó, fue llamado a declarar para explicar el movimiento financiero sospechoso.
Bolsonaro habló este miércoles por la noche en un video distribuido por las redes sociales diciendo que presentará todas las explicaciones.El informe financiero indica que ocho empleados del hijo de Bolsonaro en la Asamblea Legislativa depositaban dinero después de cobrar el salario estatal en la cuenta de Queiroz.
Desde el Partido de los Trabajadores (PT), opositor, pidieron a la fiscal general investigar por supuesto peculado a la familia Bolsonaro y sus asesores.
Fuente: Agencia de Noticias Télam