Cada año, el cielo nos regala pequeños momentos de magia, tiñéndose con cortinas de estrellas fugaces. Las lluvias de estrellas son el mayor espectáculo gratuito que podemos disfrutar, accesible para cualquiera, y guardan un magnetismo casi romántico que nos conecta con el universo, la sensación de pequeñez, el asombro.
Dentro del calendario 2025 de “lluvias de estrellas”, desde el pasado lunes 14 de abril se comenzó a ver uno de los fenómenos más destacados del año: las Líridas.
El momento clave, sin embargo, será entre la noche de este lunes 21 y la madrugada del martes 22 de abril, su pico de máxima actividad. Aunque lo cierto es que esta no es una lluvia demasiado intensa si la comparamos con otras, es una de las más célebres y alcanzará los 18 meteoros por hora.
Además, este año tendremos una Luna casi Llena, que hará que los meteoros más tenues apenas se perciban.
Aún así, merece prestarle atención, porque es una de las lluvias de estrellas más conocidas de la historia. Hay registros de sus avistamientos desde el año 687 a.C., lo que la convierte en una de las más antiguas conocidas.
Este fenómeno ocurre cada año cuando la Tierra atraviesa los restos dejados por el cometa C/1861 G1 Thatcher y se pueden ver desde distintos puntos del mundo, incluida la Argentina.
¿Qué son las lluvias de estrellas o de meteoritos?
Los meteoritos pueden ser producto de partículas y fragmentos de cometas o asteroides, a los que se llaman “meteoroides”. Cuando estos entran en la atmosfera de la Tierra, la temperatura que causa la ficción entre el meteorito y los gases de nuestro planeta hace que brillen. Es así que se pueden ver como un destello de luz que se mueven por poco tiempo. A esto se conoce comúnmente como “estrella fugaz”.
Las lluvias de meteoritos o estrellas ocurren cuando un grupo de ellas alcanzan nuestra atmosfera. Dado que todos los meteoroides que crean este fenómeno astronómico se mueven en una trayectoria paralela y a la misma velocidad, para los observadores de la Tierra parecen originarse desde un solo punto en el cielo. Este punto se conoce como radiante.
Por convención, las lluvias de meteoritos, especialmente las regulares, reciben el nombre de la constelación en la que se encuentra el radiante, como ocurre con la lluvia de meteoritos Líridas. Estas se desprenden de la constelación de Lyra, cuya estrella más brillante es Vega.
Consejos para ver las lluvias de estrellas
Para disfrutar plenamente de las lluvias de estrellas de 2025, es importante estar bien preparado. A continuación, algunos consejos esenciales para observar el paso de los meteoritos:
Lugares oscuros
El mejor lugar para ver una lluvia de estrellas es siempre un lugar oscuro, alejado de la contaminación lumínica de las ciudades. El campo y las zonas rurales se prestan para ello.
Consulta el pronóstico del tiempo
Asegúrate de que el cielo estará despejado para que la observación pueda ser óptima. Aunque lo ideal es observar las lluvias en sus días de máxima intensidad, si la climatología no acompaña es preferible elegir otro día próximo a la fecha.
Ten en cuenta el radiante
Aunque los meteoros pueden aparecer en cualquier parte del cielo, suelen irradiar desde un punto específico conocido como radiante. Si identificas su ubicación, conseguirás orientar tu observación con mayor precisión.
Adapta tus ojos a la oscuridad
Antes de empezar a la observación, evita mirar pantallas o luces brillantes durante al menos 20 minutos, para que tus ojos se adapten bien a la oscuridad.
Fuente: Lecturas / La Nación