Varios usuarios del servicio de transporte urbano y metropolitano de pasajeros advirtieron a PRIMERA EDICIÓN que debieron esperar mucho más tiempo de lo habitual para poder viajar en una unidad a cumplir con sus obligaciones.
Lo increíble del caso es que los propios choferes, tanto del Grupo Z como del Grupo H, admitieron que hay órdenes de quitar los refuerzos y que al menos la mitad de sus compañeros trabajadores quedaron desafectados de cubrir frecuencias.
Una parte de los que se comunicaron a este Diario, plantearon que en medio de la lluvia, la transferencia de Quaranta estaba desbordada de gente al mediodía por la menor cantidad de colectivos disponibles, lo que provocó una doble molestia a los pasajeros: haberse mojado por falta de lugar y llegado tarde a destino.
Ni en las redes de Casimiro Zbikoski ni de la EUTA (cámara del transporte que maneja el Grupo Z) se informó ninguna medida patronal o sindical que los usuarios pudieran conocer con anterioridad.
Cabe recordar que los dos grupos empresarios afines, que manejan el transporte urbano y metropolitano, realizaron este tipo de maniobras con impacto negativo en los pasajeros que dependen exclusivamente de los colectivos para viajar, durante cada receso escolar que se aplica en Misiones, bajo la excusa de la menor circulación de personas.
