Trágico desenlace se registró durante la tarde de este sábado, donde un efectivo de Gendarmería Nacional perdió la vida al ser atropellado por una camioneta cuyo conductor se habría resistido a frenar en el control montado.
Integrantes de Gendarmería realizaba este sábado un control sobre la ruta provincial 103, en cercanías al Parque Temático de La Cruz de Santa Ana, cuando hicieron señas a una camioneta Volkswagen Amarok para que se detenga.
Lejos de acatar la orden, el conductor arremetió contra el dispositivo atropellando a un cabo primero que se encontraba en la banquina y tras perder el control del vehículo termina despistando y volcando a un costado de la arteria.
El gendarme atropellado, identificado como Robert Barreto, de 31 años, con prestación de servicio en el Escuadrón 11 “San Ignacio” de GN, fue trasladado de urgencia al hospital Madariaga donde lamentablemente no resistió y falleció.
El deceso se comunicó oficialmente como “homicidio en accidente de tránsito” y ocurrió a la 18, aproximadamente.
Según se informó el conductor de la Amarok fue detenido y trasladado también al Hospital Escuela donde permanece internado en terapia intensiva y bajo custodia policial, con lesiones graves, politraumatismos y cortes por el derrape, caída a una zanja y el impacto contra pinos y vuelco.
Asimismo se supo que en el interior de la camioneta (que tenía pedido de secuestro por robo) estaba cargada de cigarrillos de fabricación paraguaya e ingresados a suelo argentino de contrabando a través del río Paraná.
Retén frente a la Cruz
De las versiones brindadas, todo apuntaría a que el gendarme Barreto fue atropellado cuando junto a sus compañeros de la fuerza se apostaron sobre el asfalto para realizar las señas correspondientes para que la camioneta que, tenían bajo sospecha como utilizada para actividades ilícitas en la zona, disminuyera la velocidad y frenara para ser requisada.
No solo no frenó sino que, en la maniobra por esquivar y huir del puesto de control, colisionó al cabo primero y por la fuerza del golpe le quitó la vida arrojándolo a la misma zanja a un costado de la ruta y contra las malezas y árboles.
Autoridades policiales y de GN se comunicaron con el juez de Instrucción de turno, Fernando Luis Verón y este corrió opinión a la Justicia Federal para definir la investigación de lo sucedido.
Se dispuso finalmente que intervengan miembros de la Policía Científica de la Unidad Regional XIII de San Ignacio para las labores periciales en el lugar.
Trascendió que la VW Amarok tenía un pedido de secuestro por haber sido robada en Buenos Aires, entre otros datos.