El intendente de Dos de Mayo, Ricardo Weber, se encuentra en medio de una tormenta de acusaciones, pedidos de informes y cruces con varios integrantes del Concejo Deliberante que vienen exponiendo manejos polémicos y presuntas irregularidades del funcionario renovador.
Entre las cuestiones que denuncian se menciona la compra de una retroexcavadodora por 200 millones de pesos sin autorización del Concejo Deliberante, la utilización de maquinaria vial en su propiedad mientras muchos caminos se encuentran intransitables y la compra de combustible con fondos municipales a una estación de servicio que es de su propiedad.
También la contratación de un contador de apellido Arrúa, que fue funcionario de la gestión de Alberto “Coleco” Krysvzuk en El Soberbio y se encuentra procesado por desmanejos de fondos públicos. Justo ayer ingresó al Concejo Deliberante un pedido de informe para que se detalle los motivos de esa contratación.
Días atrás, a raíz de una decena de pedidos de informe que generaron preocupación en la comunidad, el Jefe comunal accedió a concurrir al Concejo Deliberante y responder las inquietudes, aunque en algunos casos dejó más dudas que certezas.
Maquinaria vial y amenazas
En los últimos días se viralizaron en redes sociales diversos audios y videos donde había maquinaria municipal trabajando en la propiedad del Intendente y según explicaron extraoficialmente desde el municipio, era una donación de su propia tierra para emparejar y mejorar otros caminos terrados.
Sin embargo, la concejal renovadora Marcela Velázquez, dijo a PRIMERA EDICIÓN que “se ve claramente cómo están haciendo todo un trabajo de emparejado de terrenos y movimientos de suelo, que son trabajos carísimos que llevan días trabajando ahí”.
“A raíz de la denuncia que yo presento y mis pares me acompañan en el pedido de informe, el Intendente paró de trabajar en su terreno (…) pero se sabe perfectamente que estamos hablando de conflictos de intereses, que una persona que ocupa recursos públicos para beneficiarse, estamos hablando de un beneficio, no de una donación”, remarcó.
Velázquez manifestó que “después de eso he recibido amenazas de muerte y también estoy recibiendo de parte del municipio hostigamiento con la policía, porque no le quieren dar la habilitación municipal de un comercio a mi marido, yo me siento amenazada y amedrentada por este señor por hacer mi trabajo de concejal que es velar por las cosas públicas de todos los ciudadanos”.
Recordó que otra concejal, Yanina Holland, “también recibió amenazas del mismo número de teléfono que me amenazó a mí de muerte, por las denuncias que hicieron sobre la tala ilegal en una reserva ambiental de Dos de Mayo”.
“Nosotros hicimos las denuncias en Cibercrimen de San Vicente, pero todavía no hemos recibido ninguna información acerca de la investigación”, dijo.
Al mismo tiempo que las máquinas trabajaban en la propiedad del Alcalde, los vecinos de otros parajes como Pueblo Illia, Indumar y Escuela N° 9, se encuentran con los caminos totalmente deteriorados desde hace meses y el Ejecutivo no hace nada por repararlos.
Combustible y compra directa
En la otra polémica, la mayoría de los concejales acompañó un pedido de informe para que detalle sobre la compra de combustible, por parte del municipio, a su propia estación de servicio.
El Jefe comunal se defiende diciendo que cedió su estación de servicio la empresa Cruceño SRL pero la concejal Velázquez indicó que “encontramos una serie de irregularidades tanto en el domicilio del Intendente como también en la cantidad de surtidores de combustible”.
“El contrato dice que el Intendente cede todos los surtidores de combustible, pero ese día en la sesión extraordinaria el intendente dice que el escribano se equivocó, que son solamente dos surtidores de combustible. Entonces lo que estamos teniendo es una irregularidad porque el mismo intendente vende el combustible a la Municipalidad desde su estación de servicio y eso es ilegal”, remarcó la edil.
Por otra parte, explicó que también se pidió informes por la “adquisición de una máquina vial municipal que costó 200 millones de pesos” sin licitación ni autorización del Concejo Deliberante y que justamente esa máquina fue una de las que estuvo trabajando en la propiedad del intendente: “Ocupó todas las máquinas, camiones y motoniveladoras municipales para hacerse una playa estacionamiento y para remover tierra de su terreno”, explicó.
Contador procesado por corrupción
La concejal Velázquez formuló otra impactante revelación sobre Weber: contrató a un contador de apellido Arrúa que se encuentra procesado junto al exintendente de El Soberbio, Alberto Elio “Coleco” Krysvzuk, por corrupción.
“Comenzamos a investigar y cuando le pedimos al intendente que presente la lista de empleados que trabajan en la Municipalidad, con el número, con la categoría y con el sueldo que cobran, aparece el nombre de un contador encargado de dibujar los números y de hacer todos los papeles truchos para Coleco Krysvzuk en El Soberbio”, dijo.
“Carlos Arrúa en este momento que no puede ejercer cargos públicos porque está procesado por la Justicia en el caso de ‘Coleco’ y está involucrado en investigaciones con su hermano Pity Arrúa que está preso por narcotráfico. Está contratado por la Municipalidad como Compras de Personal, ese es el cargo que Arrúa tiene, le pregunté al intendente y me dijo que haga un pedido de informe que justamente ingresé”.
“Es una situación fea la que se está viviendo en Dos de Mayo porque esta persona nos trata al Concejo Deliberante como una escribanía, nos desconoce, nos insulta, nos ningunea, también ha salido por medios de comunicación a decir que él no va a permitir que gente de segunda categoría gobierne el municipio”, señaló la concejal.
Y finalizó: “Es la primera vez que yo ocupo un cargo como funcionaria pública y creo que debemos cambiar las políticas porque la sociedad está muy descreída. La ciudadanía merece transparencia, ya no estamos en la época medieval donde un Rey mandaba a cortar cabezas porque alguien dice o actúa como él no quiere. Acá nos tenemos que regir por leyes”.