Catalina Gutiérrez, una joven de 21 años, estudiante de arquitectura y popular influencer en Instagram con más de 84 mil seguidores, fue hallada asesinada en el interior de un automóvil. El caso, que ha conmocionado a la comunidad de Córdoba, está siendo investigado como un posible femicidio.
Catalina, que residía con su familia en el barrio Inaudi de la capital provincial, salió de su casa el miércoles por la noche con la intención de encontrarse con amigas. Sin embargo, dejó de responder mensajes poco después de partir.
Horas más tarde, el cuerpo de la joven fue encontrado parcialmente quemado en el asiento trasero de un Renault Clío perteneciente a sus padres. Catalina había pedido el auto para trasladarse hacia el Patio Olmos Shopping, el centro comercial más conocido de la ciudad.
Trágicamente, nunca llegó a su destino. Un joven de su misma edad, con quien mantenía una relación, ha sido detenido como principal sospechoso.
Quién era Catalina Gutiérrez
Catalina Gutiérrez era estudiante en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), siguiendo los pasos de su padre Marcelo, un reconocido arquitecto de la región. Previamente, había completado sus estudios secundarios en el Colegio 25 de Mayo, en el centro de la ciudad.
Catalina era muy activa en las redes sociales. Su última historia en Instagram, publicada momentos antes de desaparecer, mostraba una invitación para la popular fiesta Bresh en Córdoba, junto a un mensaje que decía: “Nos vemos el viernes”. También era conocida en TikTok, donde acumulaba más de 30 mil seguidores.
La preocupación creció entre sus amigas y familiares cuando Catalina no llegó a la reunión y no respondía a los intentos de contacto. Una de sus hermanas utilizó el sistema de búsqueda de Apple para rastrear sus últimos movimientos, detectando que pasada la medianoche la señal del teléfono de la víctima se mantuvo fija en la calle Pedro Echagüe al 3900, en el barrio Ampliación Kennedy. La hermana dio aviso a la policía, lo que condujo al macabro hallazgo.
Según fuentes policiales, la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo fue descartada rápidamente, ya que no faltaban objetos de valor en la escena del crimen. Además, la posición del cuerpo en el asiento trasero del vehículo y la ausencia de heridas visibles de arma de fuego o signos de violencia apuntan a un posible femicidio. Se cree que el autor del hecho intentó quemar el auto para ocultar evidencias.
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