La chocotorta, el postre más emblemático de Argentina, ha sido durante décadas un clásico en reuniones familiares y celebraciones gracias a su sencillez y rapidez en la preparación. Sin embargo, su creadora, Marité Mabragaña, recientemente sorprendió al público al afirmar que todas las recetas difundidas hasta ahora están incompletas debido a la omisión de un ingrediente esencial.
En una entrevista con el diario Clarín, Mabragaña reveló: “En aquella época se hacían tortas con vainillas. Y a mí me gustaba mojar las chocolinas en oporto, que es el ingrediente que pocos agregan. También sabía que el dulce de leche con queso crema es lo más rico que hay. Y un día pensé, ¿qué pasa si hago una torta formando pilitas?”. Esta declaración desvela que el oporto es el componente que da un toque distintivo a la chocotorta.
Además de compartir el secreto de su receta, Mabragaña narró cómo surgió la idea de este famoso postre: “En 1982, trabajando como redactora en la agencia publicitaria de Ricardo De Luca, inventé la chocotorta sin que nadie me la pidiera. Era directora creativa de Bagley y de Mendizábal, que hacía el Mendicrim. La llevé a la agencia para un cumpleaños y a todo el mundo le encantó”.
El éxito de la chocotorta llevó a la producción de un comercial, un año después de que Mabragaña le presentara la torta a Osvaldo Mendizábal, dueño de la empresa para la cual trabajaba. A pesar de la popularidad de su creación, la inventora confiesa que no supo cómo monetizarla: “Yo era empleada de una agencia, cobraba mi sueldo y todo lo que hacía era de la agencia. Nunca vi ni un peso”.
Finalmente, Mabragaña ofrece un consejo esencial para quienes deseen preparar la chocotorta perfecta: “Dejarla unas cuantas horas en la heladera. Si es de un día para el otro, mejor, tiene que quedar bien húmeda. Arriba le ponés lo que quieras”.