El sector inmobiliario sigue sin encontrarle “la vuelta” y lejos de querer solucionar algunos problemas, genera otros que no beneficia a los inquilinos posadeños. Se suma una nueva problemática que tiene que ver con los excesivos requisitos ‘no económicos’ para ingresar a las diferentes propiedades. Entre los más importantes podemos remarcar la negativa de “niños y mascotas”. En este contexto, ¿cómo hace una familia pequeña o un simple estudiante con una mascota que quiere mudarse?.
Si bien no es en todos los casos, la gran mayoría de los alquileres remarcan estos dos requisitos y quienes están en buscar de un nuevo lugar para vivir, pueden confirmarlo. PRIMERA EDICIÓN, en una primera parte del abordaje de este tema, dialogó con Adrián Torres, presidente de la Asociación de inquilinos de Misiones, quien se refirió a los excesivos requisitos a la hora de alquilar y la actualidad del mercado inmobiliario local.
“Hay muchos requisitos para el ingreso, lo que hace que se dificulte la tarea a la hora de buscar un lugar donde poder alquilar y obviamente que los precios han aumentado de una manera desorbitante”, expresó Torres en relación a las dificultades que enfrentan aquellos que buscan acceder a una vivienda en alquiler.
También destacó las consecuencias sociales de esta problemática: “Muchos inquilinos han tenido que desalojar, han tenido que en muchos casos los chicos jóvenes volver a la casa de sus progenitores, de estudiantes también hacer cooperativismo juntándose con otros estudiantes para enfrentar el costo”.
Remarcado esta sitaución fue claro a la hora de referirse a esta posición de los inmobiliarios: “La propiedad privada no es una causa de hacer lo que uno quiera en la vida, porque en realidad casi todo es privado, el taxi es privado, el colectivo es de una empresa privada, los supermercados son privados, las fábricas son privadas. Sin embargo, tienen regulaciones muchas veces en el precio, en la exportación, montón de regulaciones municipales, provinciales o nacionales, por lo tanto lo que se está haciendo con esto es, liberar a uno de los mercados, que es el mercado inmobiliario con la excusa de la propiedad privada”.
Al referirse a la percepción de una supuesta mayor oferta en el mercado, Torres aclaró: “La realidad es que es la oferta es la misma, el crecimiento no es que hay más oferta porque le conviene más al propietario alquilar, sino que hay más ofertas porque de alguna manera se expulsa al inquilino de la vivienda con presiones de precio de nuevos contratos y de exigencias que antes no existían”.
Además, el presidente de la Asociación de Inquilinos criticó la desregulación del mercado inmobiliario: “Lo que está pasando ahora es que al liberar y desregular todo esto con la derogación de la ley hace que cada uno quiera hacer lo que quiere, que es el sueño de los inmobiliarios de los que viven de eso”.
En cuanto a las soluciones, Torres hizo un llamado a la necesidad de regular el mercado de alquileres: “Tiene que existir una ley de alquileres y tiene que ser un mercado regulado como todos”.
Asimismo señaló a las grandes cámaras inmobiliarias como responsables y formadores de precios: “Son los formadores de precios y que especulan. Por eso usted puede ver locales vacíos durante meses largos y departamentos vacíos que tienen un valor y que se construyeron para ser alquilados sin embargo, pueden aguantar estar sin alquilar muchísimo tiempo”.
Destacó la situación específica de algunas zonas afectadas por la crisis del mercado inmobiliario en la provincia. En particular, resaltó la importancia económica de áreas como Miguel Lanús Este y los alrededores de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM).
“Hoy una de las zonas que se destacan es Miguel Lanús Este, la zona de UNAM, arriba de los paraísos, todos los barrios que están desde la zona de la Universidad Nacional de Misiones hasta llegar a Garupá”, señaló Torres.
En este sentido, explicó que esta región alberga una gran cantidad de complejos habitacionales que históricamente han sido demandados por estudiantes y familias pequeñas. Sin embargo, la situación actual está obligando a muchos inquilinos a buscar alternativas debido a los elevados precios y los excesivos requisitos para acceder a una vivienda en alquiler.
“Muchos estudiantes han tenido que dejar de alquilar, y en otros casos, algunos estudiantes se han juntado para poder alquilar de a dos o de a tres y así poder absorber el costo”, cerró.