El pronóstico anticipaba chaparrones y tormentas aisladas para este 1º de mayo sobre la capital provincial pero nada de ello ocurrió y esas previsiones no alcanzaron para aplacar las ganas de numerosas familias de degustar el tradicional locro y conmemorar el Día del Trabajador. En Posadas, las porciones costaron un 400% más caro que hace un año atrás.
Hoy a las 13, los registros de la Dirección de Meteorología y Prevención de Riesgos Naturales (OPAD) marcaban 33,4º C y una sensación térmica de 39,8º C en acenso, en el momento en que la mayoría de las personas se disponían a almorzar y contra todo ese pronóstico, el locro dijo presente.
En los distintos barrios posadeños desde muy temprano las ollas humeantes y grandes carteles, anunciaban la venta por porciones de locro que este año se ubicó ente los 2.500 y 5.000 pesos, salvo algunas excepciones en restaurantes o rotiserías que ofrecían combos que incluían empanadas, carne asada o pollo que trepaban a los 15 mil pesos.
En uno de los sitios visitados por PRIMERA EDICIÓN, en la zona del microcentro, la fila a las 12.30 era de unas treinta personas que aguardaban con su recipiente para retirar el locro. Se podía observar claramente a personas de todas las edades, lo que refleja que no se trata solamente de una comida que la consumen las personas mayores.
“En mi caso, desde pequeño mis abuelos y mis padres me inculcaron comer locro cada 1º de mayo, en las fiestas patrias y no me arrepiento. Cuando me fui a estudiar a Córdoba los que hacían por allá no eran similares a los nuestros de acá y dejé de comer. Me recibí, volví, hoy ya estoy casado, tengo mi familia y a mis hijos de siete y tres años les gusta mucho el locro, así que estamos firmes acá esperando nuestra porción”, comentó Rodrigo González.
Agregó que “es cierto que hace calor y no es bueno comer tanto en estas condiciones pero vamos a prender el aire acondicionado para atenuar un poco (risas) o al menos el ventilador”.
Roxana Pérez, en tanto, apuntó que “el locro es un plato para hacer frente a los primeros días fríos, algo que todavía no ocurrió, pero es muy difícil resistirse y uno aprovecha el 1º de mayo porque lleva muchos ingredientes para cocinar y en casa somos tres nomás”.
“Hacer locro hoy es muy caro”
En uno de los barrios del Oeste de Posadas, don Anselmo Benítez, contó que “antes hacíamos en casa locro e invitábamos a los vecinos de acá cerca de Santa Rita pero los tiempos fueron cambiando y hoy hacer locro es muy caro. Los que colaboran quieren figurar o hacer política, sacarse una foto y poner en sus redes sociales y ese no es nuestro objetivo. Entonces tuvimos que comenzar a cobrar para cubrir los costos pero que sea rico”.
Benítez comentó algunos de sus secretos de años de elaborar y también de comer locro y dijo que “uno apenas ve la olla, siente el aroma y ya sabe si eso puede estar rico o no. Debe ser más bien espeso porque si es ‘aguachento’, le sobra agua, se diluye el sabor y es porque le estiraron para que rinda más o no saben cocinar. Y el olor es clásico, es como un perfume de las verduras que le pusieron, de los condimentos y hasta de la misma carne, de lo contrario no huele bien y no es recomendable comprar”.
La demanda superó las expectativas
Del otro lado del mostrador, quienes prepararon, vendieron y servían las porciones, tanto en la zona céntrica, avenidas y en los barrios, coincidieron en destacar la demanda de los compradores.
“En nuestro caso, debemos decir que teníamos vendido de antemano una olla entera con unas 120 porciones y estábamos queriendo colocar otra por la mitad por si había más interesados pero vimos que el pronóstico anunciaba lluvias y tormentas desde la mañana, incluso a las 5 cayeron unos rayos, hubo truenos y se largó un chaparrón. Allí frenamos y no quisimos arriesgar pero ahora al mediodía mucha gente nos pidió más porciones y no tenemos. Ya ofrecimos para el 25 de Mayo, que será la revancha”, explicó Dominga Silvero, a cargo de uno de los puestos sobre Lavalle.
En otro de los emprendimientos gastronómicos más formales, del centro posadeño, Raúl Fleitas, detalló que “habilitamos el WhatsApp para los pedidos, fuimos haciendo promociones y funcionó bastante bien. Es muy poca la gente que reserva y no viene, incluso les damos la opción de pagar con billetera virtual para agilizar el trámite de espera y tenemos la opción de envío, con el costo a cargo del cliente, que también es utilizado por algunos que no quieren venir a hacer la fila”.
Fleitas aseguró que “nos sorprendió sí que muchos jóvenes, estudiantes universitarios, nos pidieron locro porque tenemos otras opciones en el menú, pero para esta fecha puntual del 1º de mayo fue más que el año pasado.
¿El precio? considero que va de la mano a los ingredientes, si utilizas todo de primera calidad no puede bajar de los 4 mil pesos, de ahí para arriba. Sé que se consigue más económico pero hay que ver qué productos son los que emplean”.