Mientras están llegando a los hogares, comercios e industrias las facturas de luz con subas de hasta el 300% y vienen en camino los aumentos que rigen desde este mes del 350% al 600% en el suministro de gas; el gobierno de Javier Milei se apresta a iniciar una nueva etapa de ajustes tarifarios en los servicios públicos regulados.
A partir de mayo comenzará a correr un esquema generalizado de actualizaciones tarifarias permanentes que implicará una suerte de indexación automática que tendrán todos los meses las facturas de energía eléctrica, gas y peajes de rutas.
Los aumentos tarifarios en juego -que definió por anticipado la administración mileísta- se fijarán por medio de fórmulas polinómicas basadas en los índices de inflación minorista y mayorista, el costo de la construcción, la evolución de los salarios registrados y la variación mensual del tipo de cambio.
Con el visto bueno del Ministerio de Economía comandado por Luis Caputo; las secretarías de Energía, Obras Públicas y Transporte convalidaron la inserción de los nuevos mecanismos de ajustes mensuales con el argumento de que las empresas tienen que mantener sus ingresos actualizados para hacer frente a los mayores costos operativos y salariales y llevar adelante las inversiones que aseguren la prestación y calidad de los servicios.
Más allá de las justificaciones económicas esgrimidas por los funcionarios para garantizarles a las empresas un nivel de ingresos actualizado que las proteja de la inflación; lo cierto es que la nueva ronda de aumentos que se repetirá cada treinta días promete impactar directamente en los presupuestos hogareños y en los gastos operativos de comercios y PyMEs que ya se ven seriamente afectados por el contexto recesivo y la caída generalizada de las ventas.
Doble suba eléctrica
Por el lado del servicio eléctrico, lo que está programado a partir del primero del próximo mes son dos tipos de aumentos. Uno de ellos corresponde al ajuste trimestral que se aplica en el precio mayorista de la energía eléctrica, el cual podría subir casi un 100%, según cálculos preliminares de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA).
De confirmarse ese porcentaje de incremento en el valor de la generación, el impacto final en las boletas de los usuarios residenciales que perdieron los subsidios, comercios e industrias oscilaría entre un 30 y 40%.
El segundo aumento obedece al nuevo esquema de actualización mensual que el Gobierno les reconoció a las distribuidoras metropolitanas y las transportistas eléctricas del sistema eléctrico nacional. En el caso Edenor y Edesur, el ajuste tomará en cuenta un combo basado en las mejoras salariales del sector (55%), la inflación minorista (20%) y la variación de los precios mayoristas (25%).
Las estimaciones previas arrojan una suba para las cajas de las distribuidoras y transportistas del 5% que trasladada a la boleta final representaría un aumento entre 2,5% y 3%, el cual se sumaría al impacto aportado por la remarcación del precio de la generación.
Gas, con tres aumentos
En el caso del servicio de gas, las boletas volverán a registrar un triple aumento. El primer ajuste se debe al nuevo precio del gas que regirá en el período mayo-septiembre y que deberán afrontar los hogares de altos ingresos N1, comercios e industrias que ya no cuentan con ninguna clase de subsidios. Por esta vía, el precio actual del gas de 2,94 dólares por millón de BTU (MBTU) se elevará a 4,49 dólares por MBTU.
A ese incremento superior al 50% se agregará el derivado de la “dolarización” del gas que desde ahora tendrá una actualización mensual según la variación que registre del tipo de cambio oficial.
El tercer aumento surge de la nueva remarcación mensual prevista para los ingresos de las distribuidoras Metrogas, Naturgy, Gasnor, Gasnea, Gas Cuyana, Gas del Centro, Camuzzi Pampeana, Camuzzi Sur y Litoral Gas.
Será con una fórmula integrada con la variación del índice salarial del sector privado (49%); inflación mayorista (36,8%) y el rubro “Materiales” del índice de la construcción (14,2%). Para las transportistas TGN y TGS, el esquema indexatorio se basa en suba salarial (47%); precios mayoristas (27,2%) e índice de la construcción (25,8%).
De acuerdo con los cálculos preliminares que manejan las empresas del sector, la mejora en sus ingresos oscilaría entre un 5% y 6%, con una incidencia en las facturas finales del orden del 2,5%.
Peajes remarcados
Con respecto a los peajes de las rutas nacionales, que subieron 200% en abril, la actualización tarifaria se fijará con un coeficiente compuesto por el índice de salarios nivel general (55%), variación de precios mayoristas (25%) e inflación minorista (20%).
En tanto, para los peajes de los accesos Norte y Oeste -que tienen en curso un ajuste del 100%- también se actualizarán cada 30 días con la misma fórmula de las rutas.
Fuente: iprofesional.com