El último jueves, pasado el mediodía, cinco menores, cuatro de 17 años y uno de 16, resultaron con lesiones de distinta consideración tras despistar con el automóvil en el que se desplazaban a la altura de la ex-Usina, en la avenida costanera de Posadas. En dicho siniestro, el automóvil impactó contra un utilitario que estaba estacionado en la zona, cuyos ocupantes, Julio y Gustavo Rodríguez (padre e hijo) estuvieron demorados ese día hasta las 21 horas aproximadamente.
Esta mañana, ambos se acercaron hasta PRIMERA EDICIÓN para contar su versión porque sintieron la necesidad, primero que nada de aclarar que su vehículo, una camioneta Hyundai, estaba estacionada correctamente e incluso aseguran que tienen un testigo de esto. Y también para pedir se revisen las cámaras de seguridad de la zona para poder esclarecer correctamente el hecho.
“Yo estaba cerca del vehículo a unos 30 metros, porque había un perro abandonado debajo de un banco, cerca de la rotonda. El camión estaba a unos 20 metros del giro de la rotonda. Había una Hilux estacionada, color blanca, que tengo todos los datos del propietario que salió como mi testigo de que el camión estaba bien estacionado”, dijo Julio.
Asimismo, agregó: “Yo escuché gritos que venían desde la parte recta, antes de ingresar al giro de la rotonda y ahí me asusté. El coche hace un giro entrando a la rotonda, se inclina y en dos ruedas choca y cae sobre la esquina de la carrocería del camión. Pega del lado del techo y el camión sube, choca la vereda y casi pega contra la baranda”.
Por otra parte, aseguró que el vehículo en el que circulaban los menores no chocó previamente una “jirafa” del alumbrado público como trascendió: “El auto no chocó ninguna jirafa. El auto chocó directamente el camión porque venía a muy alta velocidad. No me dejaron sacar foto del velocímetro, la policía no me dejó”.