El Juzgado de Instrucción 1 de esta ciudad resolvió la prisión preventiva para tres hombres acusados de matar a un agricultor a sangre fría y al parecer tras discutir por un chancho, señalaron fuentes del caso.
Se trata del homicidio de Ricardo Gustavo Hohenstatt (81), atacado el viernes 29 de diciembre pasado a las 21, en su chacra del paraje Isla, en Montecarlo.
Según la autopsia, la víctima sufrió un balazo que ingresó por las fosas nasales y dañó el cráneo, pese a ello caminó unos metros tratando de escapar en dirección a su camioneta, pero se cayó y prácticamente lo ejecutaron golpeando su cabeza con un hacha y con un arma blanca.
Los imputados son tres peones que trabajaban para el ahora fallecido, un hombre de 51 años y su hijo de 24, y un jubilado de 62 que hacía 15 años que era empleado del lugar, todos con domicilio en esa misma localidad.
“Mutuo acuerdo”
Según figura en las conclusiones tras finalizar la instrucción de la causa, a cargo del Juzgado de Puerto Rico cuyo titular es Leonardo Balanda Gómez, el 29 de diciembre de 2023, los tres imputados y la víctima se habrían reunido en un campo ubicado a la vera de la ruta provincial 15, paraje Isla, a los fines de realizar las habituales recorridas de trabajo.
Hohenstatt era propietario y empleador de las personas encausadas. Tras haber aparentemente compartido un almuerzo y tras varias horas, se habría desencadenado una discusión, donde uno de ellos, se presume que el peón de 51 años, habría utilizado un arma de fuego de fabricación casera calibre 22 para dispararle a su patrón a larga distancia.
El balazo impactó en la parte derecha de la nariz de la víctima, que pese a estar malherido, habría intentado huir del lugar hacia su camioneta Toyota Hilux de color azul, con intenciones de resguardarse. Sin embargo, no pudo lograr su cometido.
El agricultor dio unos pasos y se desestabilizó, se cayó y fue allí que se cree comenzaron a intervenir los restantes sujetos activos, el empleado de más antigüedad y el joven. Al parecer y aprovechándose de la situación, asestaron golpes con un hacha con mango de madera y un arma blanca tipo cuchillo, sobre su cráneo, produciéndole fracturas óseas múltiples con exposición de masa encefálica, todo ello con la finalidad de consumar el plan previamente acordado que sería el de dar muerte a la víctima, siempre de acuerdo a la resolución.
Al dictar la preventiva el juez fundamentó su determinación en las conclusiones de la División Criminalística de la Policía, que permitirían establecer que, “en primer término, habría tenido lugar el disparo y a continuación, la víctima se dirigiría hacia el rodado, el cual se encuentra cubierto de sangre para así resguardarse de la acción de sus agresores, donde finalmente murió como consecuencia de las lesiones que sufrió con el arma blanca y el hacha”.
En una de sus varias conclusiones las autoridades judiciales indicaron que “en la coautoría hay un codominio del hecho a partir de un mutuo acuerdo y una distribución funcional de tareas”; y que además le “causaron un padecimiento prolongado a la víctima y en calidad de coautores”.
Una de las hipótesis que cobró mayor fuerza desde la policía es que el hecho pudo desencadenarse tras el intento de robo de un animal del agricultor, que, si bien se especula que participaba en una reunión con sus peones, en un clima supuestamente amigable, se habría molestado porque querían carnear un chancho sin su autorización. Los tres acusados fueron trasladados a la Unidad Penal VII, ubicada en Puerto Rico.