Estudios que realizan empresas entre las personas exitosas dan como herramientas algunos hábitos para tener en cuenta. Según aclaran, son los empleados por personas que ven realizados sus sueños y cumplen sus metas.
Despegate de la oficina
Pasar demasiado tiempo metido en la oficina no permite ver claramente los objetivos. De acuerdo con la diseñadora Lauren Conrad, no hay que estar pegado a un escritorio para ser exitoso. “Hablar con otra gente en tus horas de trabajo te motiva y te ayuda a establecer conexiones con tus colegas”.
En otras palabras, no te sientas mal por salir por un café o tomar una semana de vacaciones, ese tiempo te dará la energía para hacer tu actividad principal con mayor entusiasmo.
Practica la humildad
No hay nada como estar con una persona que conoce la vulnerabilidad de la existencia, del poder y de las cuestiones materiales. Además, si consideras que la mayor parte del éxito depende siempre de las relaciones sociales, entenderás por qué Hillary Clinton asegura que no es malo mantener un bajo perfil los primeros años de tu carrera: “De hecho, yo escuchaba mucho más de lo que hablaba en mis primeras reuniones”.
Entender que tenemos mucho que aprender antes de creer que ya lo sabemos todo es tener la mente abierta a todas las posibilidades.
Define qué quieres en la vida
Lo que para una persona significa tener éxito puede no serlo para otra: de nada sirve compararte con la vecina o el colega del trabajo porque quizá el concepto que tienes de éxito sea muy diferente al de ellos.
¿Qué́ querés para vos? No tenés que ser el CEO de tu propia empresa para considerarte exitoso. ¿Escritor? ¿Ecologista? Pensalo y ve tras ello cada día.
Aléjate de malas amistades
Por ejemplo, la guionista Diablo Cody insiste en que parte de su éxito en la gran pantalla se debe ́a que siempre tuvo un séquito de buenas amigas que la ayudaban a emocionarse por los pequeños detalles de la vida, divertirse y confiar en su trabajo, aun cuando no llegaba su gran oportunidad.
Es muy importante rodearte de gente positiva y nutrir esas buenas amistades.
No pierdas tu tiempo
Las horas que pasás en Instagram, los correos de ofertas que revisás aunque no puedas comprar, pensar en tu ex, el grupo de Whatsapp que detestás y no deja de sonar… Todo eso cuenta.
Pon una alarma en tu celular cada tres horas y analiza qué́ estás haciendo en ese momento. Hazlo durante una semana y te darás cuenta en qué gastas ́regularmente tu energía.