Muchos intelectuales, artistas y personajes históricos convivieron con animales a los que dedicaron sus obras. El poeta chileno Pablo Neruda es solo uno de los que han sabido vivir una intensa conexión con perros y gatos. Comparto uno de sus poemas que me emociona por su cualidad de entender la relación con los animales, semejante a la mía y, sin dudas, a la de muchos de ustedes.
“En la mirada de un perro, entiendes que hay algo en ellos que nunca encontrarás en un humano, algo que está más allá de nuestras posibilidades. Los que tengan perros o hayan convivido apenas unos días sabrán de lo que hablo, y los que no, no me van a entender, así que sobran más explicaciones”.
Los animales son compañeros que hacen que reconectar con nosotros mismos sea mucho más fácil gracias a la pureza y calma que transmiten. El vínculo que creamos con ellos es tan intenso que hasta podemos hablar de cariño y amor por los animales. Cuando compartimos la cotidianeidad de la vida con ellos nuestro cerebro se siente feliz: está segregando oxitocina, la llamada “hormona de la felicidad”, que hace que bajemos los niveles de estrés y nos sintamos mejor.
Si hablamos de cariño y de animales, entra en escena el amor incondicional. Un animal no juzga a su dueño por sus habilidades, por su pasado o por su aspecto. El vínculo que se crea es puro e incondicional y esta incondicionalidad nos brinda seguridad y estabilidad emocional.
Laura Kuperman
Educación Canina.
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