Ayer se realizó la reunión del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM) donde se aprobó la declaración de emergencia presupuestaria. De esta manera, la rectora Alicia Bohren tendrá potestad para implementar gestiones y distribución de recursos que sean prioritarios para las diversas unidades académicas. Todo ello se da en el marco de una situación crítica del sector educativo, donde varias universidades del país se han declarado en alerta por la falta de actualización del presupuesto.
En este contexto, las autoridades de la UNaM tomarán las acciones que consideren convenientes para sostener el acceso a la educación superior. Tales medidas, impactarán en las decisiones de asignación de recursos destinados a albergues, comedores universitarios, programas educativos e infraestructura, así como el sostenimiento de los servicios necesarios para el funcionamiento de las unidades académicas.
Toma de decisiones
En comunicación con PRIMERA EDICIÓN el vicerrector de la UNaM, Sergio Katogui, explicó que la sesión extraordinaria del Consejo Superior “fue convocada para tratar un único expediente, la solicitud de declaración de emergencia presupuestaria”. Con su aprobación, aclaró que “no es un capricho nuestro, porque para las universidades el Estado nacional ha repetido las partidas presupuestarias para otros gastos”.
En la distribución de recursos, precisó que una parte se destina al pago de salario de docentes, no docentes y autoridades. El resto, es para gastos de funcionamiento: energía, agua, servicios de telefonía, seguridad, combustible y viáticos, junto con el comedor universitario, que “requiere una inversión para equipamiento y servicios, junto con los insumos para preparar los platos”, añadió.
Con una actualización permanente en costos e insumos de funcionamiento, señaló que “la pregunta es cómo vamos a sostener el mismo nivel de actividad si la cantidad de dinero que disponemos es la misma (que en 2023)”. En la distribución del presupuesto, aseguró que “creemos en la toma de decisiones colectivas, por lo tanto, vamos a realizar un trabajo entre la rectora, vicerrector, los secretarios, decanos y los vicedecanos, así como docentes, graduados y estudiantes de la comunidad universitaria”.
Acerca del cogobierno, aseguró que el diálogo se mantendrá “a fin de dar continuidad a nuestras actividades sustantivas: educación, investigación, extensión y acción social, declaradas en el estatuto de la Universidad Nacional de Misiones”. Sobre el funcionamiento de la UNaM, respondió que “entendemos que va a ser necesario establecer prioridades”.
A lo largo de este ciclo lectivo, Katogui resaltó que la educación “es un derecho y vamos a hacer esfuerzos para que todos los estudiantes misioneros que quieran acceder a la educación superior puedan hacerlo”. Mismo contexto se vive en otras universidades del país, donde varias ya se han declarado en alerta, como sucedió también con la UBA.
Además, las partidas presupuestarias para otros gastos llegan mes a mes. En este sentido, “si repetimos las actividades del año anterior, no tendríamos el recurso financiero”, añadió. Por ello, afirmó que “la declaración de esta emergencia es transmitir hacia adentro y a la sociedad la situación que atraviesa la Universidad Nacional de Misiones”.
En el tema salarios del personal docente y no docente aún no hubo acuerdo en paritaria nacional, donde rechazaron un 6% ofrecido por el Gobierno.
Sostener las actividades
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN el decano de la facultad de Ciencias Económicas, Horacio Simes, contó que “fueron más de cuatro horas de debate sobre la situación que estamos atravesando como Universidad y cada una de las unidades académicas que la componen, con las dificultades que vamos enfrentando, no solo con el presupuesto que contamos, sino con la incertidumbre sobre la evolución del mismo”.
Respecto a las dificultades en las diferentes unidades académicas, con esta extensión del presupuesto y el contexto inflacionario actual, “con una previsión de inflación cercana al 200%, va a ser muy difícil mantener el normal funcionamiento de nuestras actividades”, agregó.
El comedor universitario y los albergues como áreas claves
Entre las inversiones prioritarias, el comedor universitario y el sistema de albergues preocupan a la comunidad. En comunicación con FM 89.3 Santa María de las Misiones el secretario de Asuntos Estudiantiles de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM), Alexis Janssen, contó que en momento de funcionamiento pleno de comedores, “las bandejas diarias rondan las 4.500 a 5.000”. No obstante, explicó que esta asistencia alimentaria para estudiantes “todos los años tenemos veces que el número aumenta”.
En materia de presupuesto, señaló que “son los decanos los que toman la decisión en cuanto al presupuesto que va a los comedores universitarios”. Ante la falta de incremento de la partida presupuestaria de este año, lamentó que “al parecer el Gobierno nacional no tiene como prioridad la educación”.
Asimismo, Janssen comentó que en el tema albergues “este año tuvimos muchas solicitudes, más que los años anteriores”. Desde su lanzamiento, tuvieron más de 400 preinscriptos y tras un filtro, son “aproximadamente 130 estudiantes que ya ingresaron algunos y otros que van a ingresar a los albergues”.
Confirmó que los albergues del Campus “están al límite” en las 53 casas pueden instalar nueve estudiantes por cada una de ellas. Además, intentan coordinar con los municipios por el número de alumnos disponibles. Ante la cantidad de solicitudes y los ingresos en las casas, señaló que intentan resolver este tema porque “si de alguna forma no se les ayuda, estos chicos vuelven a sus domicilios a no poder estudiar, así que vamos tratando de resolver”.