La capital del departamento Alto Paraná de Paraguay volvió a ser escenario de un robo de película, pero esta vez no con la espectacularidad violenta del robo a Prosegur de abril de 2017 que llegó a Netflix a través de la serie “El ADN del delito”. En esta oportunidad no fue necesario sitiar la ciudad, ni tramar explosiones. Ni siquiera se disparó una sola bala.
Una gavilla de “topos” solo necesitó doce meses según los investigadores para realizar un túnel de 200 metros que los condujera hasta la bóveda subterránea de la Asociación de Trabajadores Cambistas (ATC) de Ciudad del Este, y durante el fin de semana llevarse todo el dinero que guardaban estos trabajadores en sus cajas de seguridad.
La organización nuclea a 300 cambistas y tiene como sede un espacio municipal obtenido, de acuerdo a fuentes de medios de comunicación del vecino país, gracias a fuertes conexiones políticas que además le permiten mantenerse en actividad de manera informal.
El ingreso fue descubierto el lunes. El túnel atravesó la ruta internacional PY02, que conecta a la ciudad con el Puente de la Amistad -ubicado a pocas cuadras- en la frontera con Brasil.
El presidente de la ATC, Walter Fernández, aseguró que conocer el monto total del dinero sustraído es imposible debido a que cada cambista maneja individualmente el contenido de las cajas, y tampoco cree que se animen a denunciar el monto real por temor a tener inconvenientes legales sobre su origen.
Algunos trabajadores presentes en el lugar reconocieron que los delincuentes podrían haberse llevado 2 millones de dólares a 5 millones, una cifra considerable para tratarse de una actividad informal. Pero también se estimó que la capacidad de acopio superaba los 30 millones de dólares.
En relación con la legalidad de este dinero, Óscar Orué, director nacional de Ingresos Tributarios dijo ayer que el almacenamiento de estas sumas de dinero no son de por sí un delito, aunque sí existiría una irregularidad en caso de que las transacciones no tributen.
Desde la Asociación aseguraron que este golpe significó para sus asociados la destrucción total de su capital, por lo que les resultará prácticamente imposible recomenzar: ninguno contaba con un seguro que pueda resarcir sus pérdidas.
En cuanto a la posible responsabilidad en los hechos señalaron que aún están en shock y no tienen idea de quién pudo ser el autor, aunque entienden que debe tratarse de una organización importante.
Antecedente: PCC
No es la primera vez que se da un hecho de esta naturaleza en Ciudad del Este. El 14 de julio de 2014, los empleados de Prosegur encontraron un túnel de 350 metros de largo, diseñado para entrar a la bóveda y vaciarla. La excavación había comenzado en una lujosa casa propiedad de un ciudadano brasileño.
La investigación apuntó a elementos del Primer Comando Capital (PCC) de San Pablo, el mayor grupo criminal brasileño y ramificado en todo Paraguay.
Una falla en el trazado del túnel, mediante un plano antiguo del interior de la empresa, habría impedido este robo.
Golpe de un grupo “híbrido”
Las sospechas de los investigadores del robo a la ATC apuntaron ayer a la participación de un “grupo híbrido” integrado por paraguayos y extranjeros. Así lo dio a conocer el jefe del Departamento de Investigación Criminal de la Policía Nacional del Paraguay, César Silguero: “El modus operandi realmente nos habla de un grupo probablemente híbrido de brasileños y connacionales”.
Ayer, las calles del centro de Ciudad del Este amanecieron acordonadas mientras los investigadores intentaban seguir la ruta del túnel por el que se presume fue cometido el delito. En la excavación se hallaron explosivos, inhibidores de alarmas, cámaras de seguridad y herramientas, entre otros elementos.
El titular de ATC, Walter Fernández, explicó que la bóveda fue construida hace 32 años por los propios cambistas para protegerse de la “inseguridad reinante”.
Los atracadores ejecutaron el robo desde el sábado, cuando la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) reportó un apagón. Un funcionario estatal se percató de que en una fosa subterránea un transformador “fue maniobrado por desconocidos dejando fuera de servicio gran parte del microcentro de Ciudad del Este”.
Fuente: Medios Digitales