La crecida en toda la cuenca del río Uruguay pone en jaque a familias que tienen sus hogares cerca de la costa, a pesar de que baja levemente. Las lluvias en la región son constantes y obliga a las represas brasileñas a abrir compuertas sobre el río.
Todo esto genera una situación difícil para quienes viven aguas abajo a la vera del afluente, sean argentinos o brasileños, como ocurre estos últimos días en El Soberbio, por ejemplo.
Tal es el caso de una familia del municipio de Itapiranga, en el departamento de Santa Catarina, a unos 100 kilómetros aguas arriba de El Soberbio, que perdió su hogar a causa de la creciente.
Aunque suene difícil de creer, su casa -del tipo container- fue arrastrada por el río durante tres días y viajó más de 350 kilómetros por aguas del Uruguay, entre Argentina y Brasil.
De acuerdo al medio Jornal Fronteira em Notícias, la casa contenedor “apareció” aguas abajo en una isla de Porto Xavier (Rio Grande do Sul), frente a la localidad misionera de San Javier.
Actualidad en la cuenca del Uruguay
Esta mañana se reunió el Comité de Crisis de El Soberbio para evaluar la situación de la creciente extraordinaria que afecta a mucha familias locales.
De acuerdo a lo informado, el río Uruguay está bajando y se comunicó a las familias que pueden volver a sus hogares. Además, volvieron a habilitar el servicio de balsa.
Igualmente, se informó que deben cumplir condiciones de habitabilidad que están siendo evaluadas por personal municipal, de policía, bomberos y de Energía de Misiones:
• Estar en condiciones sanitarias (limpieza y desinfección).
• Verificar las instalaciones eléctricas de las viviendas.
De esta manera, desde el Comité de Crisis pidieron a los ciudadanos con intensiones de volver a sus hogares, llamar al 100, 101, 3755-652657 y 3755-540507.
Asimismo, frente a la costa de San Javier, el río se encuentra bajando. Este lunes marcaba 6,10 metros por encima del nivel normal, con la posibilidad de que mañana martes se habilite la balsa.
Lo mismo ocurre con las localidades de Panambí y Alba Posse que sufrieron la crecida extraordinaria y obligaron a las autoridades locales a evacuar a varias familias. El servicio de balsa en ambos municipios se habilitaría en las próximas horas, a medida de que el río siga bajando.