Boca Juniors y River Plate protagonizarán hoy el partido excluyente de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol (LPF) cuando se enfrenten en La Bombonera en uno de los interzonales de la séptima fecha, en un Superclásico que para los xeneizes quedó en un segundo plano debido a su agenda internacional, y para los millonarios representa una gran ocasión para robustecer el ciclo de su entrenador Martín Demichelis.
El partido que hoy acaparará toda la atención se jugará en el barrio porteño La Boca en un inusual horario de las 14, será arbitrado por el mendocino Andrés Merlos y televisado por las señales ESPN Premium y TNT Sports.
Boca asumirá el Superclásico en el medio de las semifinales de la Copa Libertadores que disputa con Palmeiras, luego de haber empatado cero a cero como local y con la misión de avanzar a la final el próximo jueves en el partido decisivo a jugarse en San Pablo.
En el torneo doméstico, la campaña del equipo dirigido por Jorge Almirón no es buena, con apenas dos triunfos, tres derrotas en fila y un último empate de local ante Lanús (1-1) que dejó sabor a poco.
De todas maneras, Boca no dejó de lado la Copa de la Liga y es consciente de que un buen resultado en el Superclásico levantará el ánimo y lo dejará encaminado para ser uno de los cuatro que avanzarán a los cuartos de final, aunque claramente no es la prioridad del semestre.
Los xeneizes tienen apenas 7 puntos y ocho equipos arriba en la Zona B que lidera Racing Club, aunque todavía quedan siete partidos por jugarse.
Por el lado de River, está cuarto en la Zona A con 10 puntos y apenas tres equipos por delante, y sin ninguna otra competencia en su horizonte, ya que quedó afuera en octavos de final de la Libertadores y en 16vos de final de la Copa Argentina, el torneo local es el único objetivo que persigue hasta fin de año.
En Boca, el panorama respecto de la formación que enfrentará a su rival de toda la vida es de incertidumbre, con la certeza de que no contará con su capitán y líder de la defensa, Marcos Rojo, por una fuerte contractura que motivó a Almirón a reservarlo para la revancha en el Allianz Parque paulista.
La formación xeneize, en su gran mayoría, se ordenará con futbolistas que no jugaron ante los brasileños o bien sumaron pocos minutos y ahí se encolumnan Lucas Blondel, Marcelo Weigandt, Bruno Valdez, Nahuel Valentini, Marcelo Saracchi, Jorman Campuzano, Ezequiel Fernández, Juan Ramírez, Exequiel Zeballos, Darío Benedetto y Lucas Janson, todos con posibilidades de iniciar.
Entre los que podrían repetir se encuentra el arquero Sergio “Chiquito” Romero y el mediocampista Cristian Medina, mientras que Rojo, Guillermo “Pol” Fernández y el colombiano Frank Fabra fueron concentrados y hasta podrían llegar a ocupar el banco de suplentes.
En River el panorama es más claro, ya que Demichelis ensayó un equipo con el regreso de tres titulares: Leandro González Pírez, Nicolás De la Cruz y Enzo Pérez, y con la sorpresa de Andrés Herrera en el lateral derecho.
En esa formación sorprende la ausencia de un histórico como Milton Casco en el lateral derecho, ya que descansó el fin de semana pasado en el empate con Banfield (1-1) para estar ante Boca, tampoco estará el jugador que ocupó el lateral derecho, Santiago Simón, quien fue muy elogiado por el entrenador, pero sí irá de entrada González Pírez pese a que hace casi dos meses que no juega.
En cuanto al resto del equipo y en relación al partido ante Banfield regresará el colombiano Miguel Borja por el delantero venezolano Salomón Rondón, Enzo Pérez por Matías Kranevitter y De la Cruz por Pablo Solari.
River, que ganó por última vez en La Bombonera en 2018 con uno de los goles anotados por Gonzalo “Pity” Martínez, quien estará entre los suplentes, desea quedarse con el Superclásico por segunda vez en el año tras el triunfo anterior del 7 de mayo pasado en el estadio Más Monumental por 1-0 con el gol anotado por Miguel Borja, de penal.
Télam