El intendente de Campo Viera, Germán Burger, calificó como “actitud terrorista” la adoptada por alrededor de 70 integrantes del Movimiento Teresa Rodríguez que se acercaron este miércoles por la mañana a la Municipalidad local a reclamar mayor asistencia social e incluso amagaron con tomar el edificio ante la negativa a recibirlos por parte del jefe comunal.
En una conferencia de prensa durante la tarde, Burger manifestó su “preocupación por la conducta agresiva y peligrosa del movimiento social MTR que está afectando el bienestar y la seguridad de la comunidad”.
“Nos inquieta profundamente que las acciones terroristas provocadas por individuos del MTR hayan resultado en situaciones de corrupción, desorden social, usurpación, atentado contra la libertad, el libre tránsito y la seguridad de los vecinos”, señaló.
El alcalde subrayó que los manifestantes “secuestraron” no solo a los trabajadores municipales, sino que mantuvieron cautiva a toda la comunidad. “Están con la cara tapada y a través de insultos, amenazas, palos, piedras y sustancias inflamables dicen manifestar su derecho”, cargó.
Visiblemente molesto, Burger remarcó que “no venían por diálogo, sino por otra cosa (…) Vienen con una forma de terroristas y yo con terroristas no dialogo ni negocio”.
Afirmó también que los piqueteros “exponen a niños que deberían estar en las escuelas y embarazadas al frente del movimiento” y que “esta gente se manifiesta haciendo daños a los bienes públicos. Rompen, pintan, defecan, tiran basura”, precisó.
Además, aseguró que al menos el 50% de los manifestantes no vive en Campo Viera, “vienen de otro municipio solo a hacer daño y eso no lo vamos a permitir”.
El violento hecho tuvo lugar alrededor de las 8 de la mañana. “Estaban con los rostros cubiertos con paños, anteojos y gorras. Eso nos dio la pauta de que tenían otras intenciones. Además llevaban palos, bolsas con piedras y con basura que empezaron a tirar frente al edificio”, detalló a FM 89.3 Santa María de las Misiones el comisario Claudio Ludtke, jefe de la UR-II de la Policía con asiento en Oberá.
Ante la negativa del jefe comunal de recibirlos, cerca de las 10 de la mañana, la masa piquetera avanzó hacia el edificio buscando entrar por la fuerza. “Comenzaron a lanzar piedras que impactaban en los efectivos policiales y tuvimos que reforzar el cordón. Se efectuaron algunos disparos intimidatorios de estruendo y esto alteró la conducta de ambas partes. Después se acercó un grupo más agresivo que tenía nafta dentro de unos sachets de vino que alcanzó a cinco efectivos policiales”, reconstruyó Ludtke.
A raíz de lo ocurrido, cuatro efectivos resultaron con heridas de diferente consideración y uno de ellos fue derivado al Hospital SAMIC de Oberá para observación. “Más allá de estas lesiones se produjeron importantes daños en los vidrios de las puertas y ventanas de acceso a la Municipalidad. Después de unos minutos tensos, logramos que depongan su actitud y abandonaran el lugar”, explicó.
Ludtke señaló además que pusieron al tanto al juez que entiende en la causa de toda la situación vivida, con imágenes. “Estamos esperando algunas medidas que van a tomar porque tenemos daños, lesiones y resistencia a la autoridad entre otros delitos”.