La Federación Misionera de Handball redondeó este jueves una jornada perfecta en el Torneo Argentino de Cadetes, que se está disputando en Mendoza, ya que sus dos representantes consiguieron el ansiado ascenso.
Por el lado del equipo masculino, los chicos derrotaron en semifinales a la Asociación Pehuajense de Balonmano (APeBal) por 32-18 y se metieron de lleno a la definición del campeonato.
La victoria le valió el ascenso al Argentino A, la máxima división nacional y este viernes buscará coronar su participación con el título. El mismo lo dirimirá desde las 11.10, ante San Luis, que dejó en el camino a la Asociación Amigos del Balonmano del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (AsAmBal).
Por su parte, las chicas también lograron una de las dos plazas en juego. En su caso para el Argentino B, tras superar por un claro 25-18 ante su escolta La Pampa.
Este viernes, a las 13.50, disputarán su último encuentro. El rival será La Rioja y una victoria consagrará campeonas a las misioneras.
“La verdad es que las sensaciones de volver a ascender a la B (el caso del equipo femenino) son muy buenas. Hemos bajado a la C porque lamentablemente el año pasado los chicos no pudieron costearse el viaje a Neuquén, esa es la realidad. Y bueno, sí, en Bariloche salía el torneo y por los costos no pudieron viajar los chicos. Hay un muy buen equipo de varones y de chicas, pero económicamente era imbancable ese viaje. Así que volver a subir de categoría significa volver a remarla”, afirmó Susana Alfonzo, una de las entrenadoras, a EL DEPORTIVO; y además explicó que, para viajar, cada chico tuvo que desembolsar 125 mil pesos.
Más allá de todo, queda esa sensación de que tanto esfuerzo valió la pena.