Si bien el título de la nota refiere al libro de Patricia McConnell, experta en comportamiento animal, además de profesora Adjunta de Zoología en la universidad de Wisconsin-Madison y autora de libros muy recomendables para quienes incursionamos en el mundo de la educación canina, lo que quiero compartir hoy es un texto para reflexionar de Andrea Serrano, educadora y terapeuta canino y responsable de la escuela “MrMutt Educación Canina”.
“¡Estoy cansada de ver perros arrastrados por el cuello mientras huelen, mientras se saludan, mientras hacen pis, mientras hacen caca, mientras miran a la gente, mientras miran a otro perro, arrastrados por hacer cosas de perros!
Arrastrados por nuestras prisas, por nuestro mal manejo de correa, por nuestra nula empatía, SEÑORES Y SEÑORAS ellos también tienen un sistema nervioso igual que el nuestro, sienten dolor y molestia, tienen vértebras que también se desvían, también tienen dolores de cabeza, tienen columna vertebral que se puede resentir, tienen tráquea y a los lados la glándula tiroides, también tienen el hueso hioides, y por supuesto también tienen venas y arterias que llevan la sangre por toda la cabeza como nosotros, si, si, igualito que nosotros.
Me gustaría que por un momento viésemos el mundo a su altura, atados del cuello y con un paseo como los que muchos aguantan…a ver lo que tardaríamos en ponernos de mal humor, frustrarnos y después resignarnos…”.
Reflexionemos sobre esta frase de Santi Vidal.
“Tenemos la obligación de ser amables en el manejo de la correa… Al otro extremo va atado del cuello un ser vivo”.