Mirta Soria, directora de Gerontología de Salud Pública, aseguró este lunes que no encontraron situaciones de abandono de personas en el geriátrico del barrio Palomar de Posadas que había sido denunciado por el cónsul paraguayo en esta ciudad, Rolando Goiburú.
Fue en una entrevista con la FM 89.3 Santa María de la Misionesdonde además contó que actualmente en la capital provincial “contamos con 15 residencias geriátricas, donde llegamos para verificar su habilitación; además, en lo que se refiere a los controles, lo hacemos a través de los referentes y profesionales médicos que asisten a estas residencias”.
Además, “en lo que se refiere a la ayuda médica siempre estamos atentos y llegamos con diferentes inmunizaciones, con las vacunas anti COVID, antigripal, antitetánica y hepatitis, siempre guiándonos por protocolos los cuales pusimos en práctica en épocas de pandemia”.
En referencia al establecimiento denunciado días atrás, mencionó que “este lunes hablé con el cónsul paraguayo Rolando Goiburú, quién fue el encargado de denunciar esta irregularidad, y por ende nos presentamos con la Policía en dicho lugar“.
“Nos encontramos con que no había ninguna persona de nacionalidad paraguaya; si bien hay una persona de nacida en Paraguay, la misma ya tiene ciudadanía argentina. En el lugar, y tras el allanamiento realizado, se pudo constatar que había 8 mujeres en total“, agregó.
Y concluyó: “No se constató que ninguna mujer estaba en situación de riesgo, ni abandonada como aseguraban en la denuncia que circulaba. Además, el médico forense examinó a las ocho mujeres que se encontraban en el lugar y a todas las halló sin ninguna lesión de gravedad, ni algún estado de salud que tengan que derivarla a un centro asistencial“.
“En la actuación y verificación que llevó adelante la Policía estuvimos junto con el cónsul paraguayo, puesto que creo que es la mejor manera de trabajar en forma articulada y conjunta”, subrayó.
“Estaba todo bien, dentro de lo que se puede esperar de una residencia”, sentenció. Y sostuvo que un parámetro que suelen observar es que “al ingresar, algo que siempre nos llama la atención cuando no está bien, es el olor a orina. Cosa que no pasó en este lugar. Si bien hay ciertas falencias de infraestructura que observamos ya en su momento, sabemos que no pueden sostenerse con un ingreso de $70.000 aproximadamente por cada persona que vive allí. Este lugar recibe asistencia del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia con víveres secos y carne. También ese organismo les paga la luz”, precisó.
Consultada si entonces se trató de una falsa denuncia, se limitó a responder que “no sabría decir”, pero sí insistió que “de los geriátricos que nosotros tenemos conocimiento, están en condiciones y habilitados tal cual lo pide la ley. De los ‘truchos’, no tenemos conocimiento porque la gente no los denuncia de manera formal, entonces, al no saber donde están, nosotros no podemos actuar o ir verificar de manera fehaciente”.
Por otra parte, Mirta Soria apeló a los familiares de los alojados en los geriátricos para que controlen las prestaciones. “Si voy y dejo a un familiar, depende de mi familiar si se cumple o si desmejora su situación”, indicó.
Geriátrico lleno
En otro tramo de la charla, la funcionaria ratificó que la Unidad Geriátrica de Miguel Lanús se encuentra completa y aún dudan de poder llevar a una mujer internada en un sanatorio privado, que fue sacada de un geriátrico posadeño descompensada. “Debemos ver si hay lugar, pero el familiar responsable tiene que hacerse cargo al igual que las obras sociales que no contemplan un lugar adonde llevar a su afiliado adulto mayor”, indicó.
El Geriátrico de Miguel Lanús “siempre está completo por la asistencia que reciben por parte de excelentes profesionales. Igual que de parte de la Escuela que funciona allí”, dijo.
Vacunación
Finalmente, se le consultó a Soria si llegaron las vacunas antigripales para los adultos mayores que debían venir de Nación, a lo que respondió: “Sí, están mandando y hace unos 15 días llegaron las vacunas para los mayores de 65 años. En cada uno de los geriátricos llegamos con las vacunas, no solamente para las personas que residen allí, sino también para todo el personal que se desempeña en dichas residencias; así que fue una vacunación completa”.