El presidente de la Comisión Vecinal de la chacra 135, Pablo Silva, dialogó con este Diario y contó que “tenemos todo tipo de hechos como ser robos de carteras, mochilas, celulares e intento de arrebatos a niños, hombres, mujeres, ancianos y adolescentes”.
La situación de inseguridad, si bien lleva muchos años, se agudizó durante el presente período de vacaciones debido a que los malvivientes aprovechan este tiempo para ingresar a la viviendas. En este contexto, los residentes reclaman la instalación de cámaras de seguridad y un sistema de monitoreo para prevenir los delitos.
“Hay un montón de grupos, incluso familias enteras, que se dedican a lo ilícito, y estos son los que cometen todo tipo de delitos cada vez más graves, a tal punto de que desvalijan casas enteras”, remarcó.
Recordó que el pasado 23 de diciembre un vecino que se encontraba de viaje por las fiestas de fin de año sufrió el robo de su vivienda, situación que se repitió la madrugada del lunes en otra casa de la zona. “Andan todo el día merodeando, investigan y cuando ven gente que se va de vacaciones, que viaja, les entran a robar. Como están a pocas cuadras te hacen una mudanza en varios viajes y caminando”, señaló.
Observó que los hechos de inseguridad se potenciaron durante las últimas semanas debido a las vacaciones aunque reconoció que “siempre tuvimos este tipo de problemas”.
“No existe vecino que no haya sufrido un robo, en mi caso fueron dos veces en mi domicilio, estando la casa en construcción igual entran, se llevan materiales, incluso robaron un inodoro instalado”, apuntó.
Detalló que el barrio está compuesto de terrenos particulares con viviendas de familias de clase media que en su mayoría se dedican a la actividad privada y trabajan durante todo el día, realidad que es conocida por los delincuentes. “En época de clases no hay nadie en el barrio y los delincuentes se aprovechan de eso, entonces vos dejás tu casa y muchas veces tenés que volver porque te entran a robar. Antes esperaban que llegue la noche, pero ahora entran a cualquier hora, incluso con gente durmiendo adentro de las casas”, advirtió.
Por todo lo mencionado, Silva sostuvo que una posible solución es la instalación de cámaras de seguridad y un monitoreo permanente del barrio.
“Son dos o tres calles por las cuales ingresan los ladrones al barrio, y salen por las mismas caminando, entran por las calles paralelas a las avenidas Almirante Brown y Blas Parera y salen por las mismas. Desvalijaron una casa entre cuatro o cinco personas, hacen varios viajes a la madrugada, entraron el lunes a una vivienda y después el martes los volví a ver con linternas a la una de la mañana en el barrio”, reveló.
A todo esto observó que “la situación económica se agrava y esta gente no tiene escarmiento, hay una impunidad y eso genera impotencia. Estamos en una verdadera zona roja de la ciudad”.