Marruecos eliminó a España por penales (3-0), luego de empatar sin goles durante los 120 minutos de juego, y se clasificó por primera vez en su historia a los cuartos de final de un Mundial.
Los españoles fallaron sus tres ejecuciones y el lateral Achraf Hakimi, compañero de Lionel Messi en París Saint-Germain, sentenció el pase con una definición pinchada ante el arquero Unai Simón.
El partido fue arbitrado por el argentino Fernando Rapallini, quien amonestó a sólo dos jugadores en el último tramo del período reglamentario: Aymeric Laporte (77′), de España, y Romain Saiss (90′) en Marruecos.