El último fin de semana se realizó en el predio de La Rural, en la ciudad de Buenos Aires, una nueva edición de la feria Matear, donde más de 130 expositores, entre pequeños molinos y productores de yerba mate junto a otras empresas reconocidas, pudieron compartir con el público el producto en todas sus facetas: degustación, preparación y elaboración, y más. También hubo espacios para los negocios.
Matear 2022 convocó a mucho público durante el viernes, sábado y domingo. Variedad e innovación de productos, diseños de packaging y de accesorios, y tecnología aplicada a las nuevas formas de consumir yerba mate pudieron disfrutarse.
El presidente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), Juan José Szychowski destacó que “esta edición fue un éxito”.
En diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones resaltó que “la yerba es mucho más que un paquete en la góndola. Cuando algún consumidor va y compra un paquete de yerba, hace un buen mate y disfruta de ese mate, pero atrás de eso hay una cadena productiva que es muy importante y esto quisimos hacerlo saber”.
Añadió que también lograron “vincular los pequeños productores, los pequeños molinos con los compradores de estos grandes centros de consumo como en este caso fue la ciudad de Buenos Aires, armamos rondas de negocio”.
Además de los negocios, otros de los puntos centrales del Matear fue que “todo el público se lleve una muestra gratis, que conozca el sistema productivo. Había una pantalla gigante donde permanentemente se hacían charlas donde iban contando lo que era el proceso productivo, cómo se hace la yerba, cómo se puede preparar un buen mate y lo bien que hace a la salud la yerba mate”.
Seguidamente, destacó que de los más de 130 expositores, “prácticamente más de la mitad eran pequeños molinos que llevaban su yerba, muchos eran la primera vez que estaban en una feria de estas dimensiones”. Y sumó que “otros eran expositores que hacían cosas referentes a la yerba, por ejemplo fabrican mates, termeras, bombillas, había un estand de una empresa que hacía una cerveza a partir de yerba mate, otros que hacían unas bebidas, hacían infusiones a partir de la yerba, fue muy interesante”.
Con respecto al trato de la gente con los productos exhibidos, mencionó que “la gente estaba muy sorprendida al ver la variedad de yerba que había”, ya que en Buenos Aires -ejemplificó- se encontraban en el supermercado con siete, ocho marcas de yerba.
En el Matear se encontraron con marcas que “tienen algún aspecto diferencial porque son orgánicas, son estacionadas naturales otras, tienen alguna mezcla con alguna otra hierba que lo distingue, viendo todo este proceso productivo y las distintas cosas que tiene la yerba mate, creo que fue fundamental”, resumió.
En esta línea, además de la parte gourmet de la yerba mate (como tortas, masitas, cervezas e infusiones), destacó también la parte tecnológica.
Una empresa que fabrica un termo que autocalienta el agua, ya que se enchufa directamente al tomacorriente; otra empresa que seca la yerba mate a muy baja temperatura; y otra que mantenía caliente el mate para que la yerba no se enfríe, fueron algunas de las más innovadoras ideas que se vienen en el futuro. “Mucha tecnología cuidando la tradición de lo que es el mate”, destacó el titular del INYM.