Días atrás, manos anónimas dañaron con pintadas el busto del reconocido compositor misionero Alcibíades Alarcón, ubicado en la plaza Villa Urquiza de la capital misionera.
Esto llevó a que un grupo de vecinos, autoridades, artistas, familiares y amigos del recordado artista, se congregara ayer, al pie de la obra para expresar su rechazo ante tan lamentable hecho y hacer un llamado para tomar conciencia sobre la importancia de preservar el patrimonio de todos los misioneros.
El acto contó con la presencia del ministro de Cultura, Joselo Schuap, el presidente de la Comisión Permanente de Homenaje al músico misionero Roberto Acosta, el hijo del cantautor “Kiko” Alarcón, la secretaria de Cultura y Turismo municipal, Belén Hernández, el titular de la Asociación Flor del Desierto Juan Manuel Sureda y el presidente de Músicos Populares Misioneros, Jorge Reyes. Además, participaron alumnos de la Escuela de Comercio 18, Normal 10 y representantes del Círculo de Gendarmería, entre otros.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, Roberto Acosta expresó: “Primero me agarró tristeza e impotencia, más trabajando en la cultura y promocionando la música, la tierra y la identidad misionera; entonces duele más, pero, no hay mal que por bien no venga… por la reacción positiva de la ciudadanía, al final van a arreglarlo: la Municipalidad y el Ministerio de Cultura provincial se han comprometido”. En este sentido, Acosta indicó que sería bueno, reinaugurar el busto el próximo 9 de septiembre fecha del natalicio de Alcibíades Alarcón y “creo que esa angustia, tristeza e impotencia, se transformó en alegría”.
A su turno, Víctor “Kiko” Alarcón expresó su emoción por la cantidad de personas que se hicieron eco del hecho y señaló: “Esto quizás sirva para que la gente se interese en estudiar e investigar sobre la cultura misionera y tenerla un poquito más arriba como nos merecemos”.
Luego, la funcionaria municipal Belén Hernández, expresó el compromiso de su cartera en restaurar y poner en valor la obra dañada y a su vez señaló: “Lo que hay que restaurar, a veces, no es sólo lo material o lo que se ve, también hay que restaurar la memoria, el compromiso, los valores y entender que las figuras de Alcibíades, entre otros, forman parte de nuestra identidad como posadeños y misioneros”.
Así también, Manuel Sureda expresó que “estas cosas nos golpean y nos llama a la reflexión”.
Luego, Joselo Schuap indicó que “no podemos dejar pasar estas cosas, no porque se haya escrito algo que denota un estilo musical diferente… y evidentemente no conoce a Alcibíades Alarcón”. Y agregó: “la música es una expresión del espíritu en el mundo entero. A cada uno le llega a su manera, pero hay cosas que merecen respeto”. De esta manera comentó que “Alcibíades Alarcón no va a pasar de moda nunca, otros serán parte del fruto del mercado discográfico, eso es otro mundo, esto es parte de nuestra cultura que queremos respetar”.
En este marco, Schuap recordó las distintas tareas que realiza la Secretaría, tanto en la puesta en valor como los arreglos en la Casa de Quiroga (San Ignacio), los museos Juan Yaparí y Andrés Guacurarí, de Posadas y el cuidado de la pinacoteca misionera.
Finalmente, los presentes cerraron el acto entonando la popular canción de “Misionero y guaraní” en homenaje al más que nunca vigente compositor Alcibíades Alarcón.
Alcibíades Alarcón
Es uno de los músicos y poetas más entrañables de la tierra colorada. Nació el 9 de septiembre de 1940 en Posadas. Cursó la primaria en la Escuela Fraternidad y la secundaria en la escuela de Artes y Oficios.
Se casó Josefina González, unión de la que nació su único hijo Víctor Alcides. Además de participar de diferentes festivales y peñas fue creador de recordados temas como: “Misionero y guaraní”, “Dime”, “Por un Trompito y un Tren” y “Dime tú Florcita Mía”. Falleció el 16 de abril de 1985 a los 44 años de edad.