El Pentagrama es un poderoso símbolo de protección, simboliza el balance de los cuatro elementos que son el aire, el agua, el fuego y la tierra con el espíritu todo unido a través de un círculo que encierra el pentagrama.
Cada punta del pentagrama pertenece a un elemento, son las identificaciones:
La tierra se identifica con la punta inferior a nuestra mano izquierda del pentagrama, representado la seguridad, el alimento, el crecimiento y todo aquello que la madre tierra nos regala cada día.
El fuego ocupa la punta inferior a mano derecha del pentagrama, identifica la pasión que tenemos como seres humanos, aquello que se hace sólo por instinto y que muchas veces la razón nos impide continuar con nuestras acciones.
El aire se ubica en la punta superior a mano izquierda del pentagrama, esta parte del símbolo representa el poder del razonamiento, el poder pensar y la inteligencia que puede tener cada ser humano.
Al agua le corresponde la punta superior a mano derecha del pentagrama, donde se ubica lo puro como lo es la alegría verdadera, la tristeza que no es fingida, todo aquello que se hace de corazón y el ciclo de la vida desde el momento en que nacemos hasta el último aliento que damos.
Quinto elemento, éter es la punta superior que representa el espíritu, el pegamento que une todas las cosas y todos lo elementos. Constituye el poder espiritual de carácter omnipresente que se encuentra por todo el universo y es la energía con la que se forma el espíritu. Antes de que surgiera el universo que podemos conocer en nuestra limitada percepción de seres humanos, ya existía el Akasha. Porque es eterno, sin principio ni fin, el origen de todo.
FUEGO. Purificador y armonizador a nivel espiritual.
AGUA. Purificador y tranquilizador a nivel emocional.
TIERRA. Contenedor de la energía a nivel físico.
AIRE. Conductor y liberador de energías a nivel mental.
ESPÍRITU. ÉTER. La quinta esencia presente en todo, la luz del espíritu, la causa de toda la existencia.
Representa la totalidad del mundo sensible, concretada en los cuatro elementos más el quinto: el éter, la energía del mundo espiritual.
El espacio o éter alberga a todos los elementos existentes (el fuego, la tierra, el aire y el agua), siendo su sustrato, pues dependen de él para moverse libremente.
Por ello el pentagrama es símbolo de la manifestación del hombre, al término de su evolución biológica y espiritual.
Nos vamos acompañando.