Se estima que alrededor de 40.000 personas se mueren al año por muertes súbitas (naturales, inesperadas y rápidas) y, según precisó el presidente de la Federación Argentina de Cardiología, Luis Aguinaga, a FM 89.3 Santa María de Las Misiones, la radio de PRIMERA EDICIÓN, “el 99% de estas personas no recibió reanimación cardiopulmonar”.
Señaló que si bien desde la Federación se trabaja desde hace años en reanimación cardiopulmonar, “sabemos que a nivel de la población general la educación es baja, apenas un 8 a 9% de las personas sabe hacer RCP”.
Además destacó la importancia de la ley recientemente sancionada porque “apunta a que toda la sociedad esté involucrada, que todos tengamos conocimientos, seamos o no médicos, sobre las maniobras de RCP correctas en caso de tener que asistir a una persona. Eso puede dar tiempo a los servicios de emergencia e incluso en algunos casos se puede recuperar al paciente sin llegar al desfibrilador”.
Aguinaga señaló que “lo ideal es contar con ambos, la reanimación cardiopulmonar y el desfibrilador automático que no requiere un conocimiento médico para su uso, con el dispositivo conectado y un mínimo de entrenamiento el dispositivo avisa si hay que dar una descarga”.
Recordó que cuando contamos con una persona que sabe hacer RCP y un desfibrilador dentro de los primeros tres primeros minutos se podrá atender al paciente y bajar la mortalidad entre un 40 y 50% en este tipo de eventos. “Incluso si no contamos con un desfibrilador y solo una persona que sabe hacer reanimación, esto ayuda muchísimo para superar este tipo de eventos”, detalló.
La importancia del tiempo
Aguinaga se refirió a la importancia de la asistencia inmediata. Señaló que durante los primeros tres minutos el paciente es recuperable, y según los estudios, “por cada minuto que pasa después de esos tres minutos se pierde el 10% posibilidades de recuperar al paciente. Dentro de los primeros tres minutos aún no sucedieron los cambios a nivel metabólico y de tejidos, sólo es más a nivel eléctrico”, explicó.
El frío y el estrés, enemigos del corazón
El especialista indicó que “el invierno muy frío y el estrés son enemigos de nuestro corazón. Hay numerosos estudios donde se evidencia que en épocas donde socialmente hay mayor estrés -como en las guerras y las catástrofes naturales- el número de muertes súbitas por infartos o accidentes cerebrovasculares se triplican y hasta cuadruplican. También se triplica el número de infartos ante situaciones de estrés emocional positivo o negativo muy grandes, como cuando un país pierde la final del mundial”.
Detalló además que el frío está muy relacionado con los eventos del corazón. “No es casual que el horario donde más se producen los infartos es a primera hora de la mañana y más durante el invierno”, indicó.
La letra chica de la ley de muerte súbita
Siete años después de su sanción, finalmente fue reglamentada el viernes la Ley 27.159 de Muerte Súbita que, entre otras cosas, establece en qué instituciones será obligatorio contar con desfibrilador y personal capacitado para su uso. De adherir Misiones a esta normativa nacional, deberán contar con desfibriladores todos los lugares de acceso público incluyendo estadios, natatorios, centros deportivos, gimnasios. También cárceles, comisarías, centrales de policía y cuarteles de bomberos.
Locales de juego de azar, bingos, casinos, bancos, entidades financieras y de crédito. Además, aquellos espacios con capacidad de más de mil personas o que circule esa cantidad o más de personas a lo largo de un día: parques de diversiones, terminales y estaciones de transporte internacional y nacional, centros comerciales, locales de espectáculos, locales bailables, salones de fiestas, cines y teatros.
También instalaciones sociales, religiosas, culturales o de enseñanza; hoteles, clubes de campo, campings, piletas, balnearios y barrios privados; eventos, exposiciones, museos, lugares turísticos, muestras y salas de conferencias; oficinas o establecimientos públicos o privados donde circulen más de 1.000 personas al día. Se incluye a los aviones, embarcaciones o trenes de larga distancia con capacidad para cien o más personas.
En la actualidad, Misiones tiene una ley provincial, aprobada en 2018, que si bien estableció que las instituciones públicas y privadas deben contar con desfibrilador y estar debidamente identificadas por ello, no es tan amplia como la ley recién reglamentada.