Días pasados, dos vecinos de la zona de Itaembé Guazú en Posadas sufrieron el robo de televisores. Ayer la policía pudo recuperar los aparatos y detener a uno de los autores.
La pesquisa comenzó el pasado 30 de mayo, cuando un hombre de 39 años con domicilio sobre calle Las Violetas y que además sería propietario de una barbería, denunció que le sustrajeron una TV plasma de 60 pulgadas, además de una máquina de cortar cabello y una patillera.
Finalmente el pasado jueves, una mujer de 41 que vive en la calle Irupé, en el barrio Procrear, denunció que en horas de la mañana de ese día desconocidos habían ingresado a su vivienda llevándose un televisor Smart de 43 pulgadas.
En las averiguaciones, personal de la Brigada de Investigaciones de la seccional Decimonovena buscaron cámaras de seguridad de viviendas vecinas que pudieran aportar datos del hecho y los autores. Por fortuna quedó registrado el accionar de los sospechosos cuando trasladaban los electrónicos a pie por las veredas del barrio en las fechas mencionadas. En uno de los casos uno llevaba la tele envuelta en una frazada. Esas imágenes llegaron a perfiles de redes sociales y se viralizaron.
En ellas podía apreciarse con detalle las vestimentas de los sospechosos. El paso siguiente fue identificarlos, para así procurar su detención.
La vigilancia encubierta en el barrio en los lugares críticos y las horas en las que los delincuentes cometieron los robos, permitió detener en la intersección de las calles Irupé y Las Tacuaritas a un joven de 23 años identificado con el alias de “Polaquito”, quien tenía las mismas vestimentas que vestía al momento de uno de los robos y no supo justificar su presencia en el sitio.
Las averiguaciones para hallar los televisores condujeron al barrio San Gerardo, donde la policía dialogó con un hombre de 37 años quien manifestó haber adquirido la TV de 43 pulgadas a “Polaquito”, por la suma de 25 mil pesos.
Luego, en el barrio Santa Rita donde un joven también afirmó heber comprado de buena fe un televisor de 60 pulgadas a “Polaquito” y a otro sospechoso conocido como “Beisu”, por 15 mil pesos. Además les ofrecieron dos máquinas de cortar cabello a él y a un amigo que estaba presente. Como finalmente aceptó pagar por la TV, les regalaron los últimos elementos. Los equipos fueron secuestrados y luego de las tareas de rigor los elementos serán devueltos a sus dueños.
El joven de 23 años quedó a disposición del Juzgado de Instrucción en turno investigado por el delito de “robo” y “estelionato” (venta de un elemento robado).