Lo hallaron sin vida el domingo al mediodía pero ya llevaba al menos una semana de muerto. El cuerpo de Luiz Osmar Neis (68) estaba en estado de descomposición y ordenaron autopsia. Esta pericia confirmó que murió por un disparo en el tórax pero hasta ayer aún no se sabía quién podría haber sido el autor ni las circunstancias. La continuidad de la investigación podría arrojar certezas para desentramar los minutos finales de la víctima, los cuales aún son un misterio.
En base a datos aportados por el hijo y por orden del Juzgado de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, efectivos de la Unidad Regional V regresaron ayer a la vivienda ubicada en Puerto Península, en busca de armas de fuego que Neis tendría guardadas en diferentes lugares de la casa. La intención es conocer si quien habría sido el asesino se apoderó también de esas armas, además de la camioneta Toyota Hilux. La ausencia de este vehículo había disparado la búsqueda del hombre, quien se presumía se había ausentado a bordo de ella.
En las redes sociales y medios de comunicación se había viralizado la imagen de Neis para quien pudiera aportar datos y en la publicación hasta se hablaba de una recompensa, sin mencionar el monto. Previamente su hijo de 29 años había denunciado su desaparición, cuando fue a visitarlo y no lo encontró. Fue un vecino quien halló el cadáver de Neis y avisó al hijo. Estaba con el torso desnudo y boca abajo.
Un dato importante que manejan los investigadores es que la víctima vivía sola, era muy cerrada y no tenía demasiada relación con los vecinos ni tampoco con sus familiares.
La pericia forense indicó que tenía un disparo en la zona derecha del tórax y el proyectil calibre 22 quedó alojado en el sector intercostal izquierdo.
Sus manos estaban prácticamente separadas del cuerpo pero esto no habría sido por una situación violenta cuando aún estaba con vida, sino por la acción de pequeños animales.
Llamativamente en la casa no había desorden, estaba su teléfono celular, tarjetas bancarias y además hallaron varias partes de una prótesis dental en el sector del garage de la casa. Tampoco hallaron rastros de arrastre, por lo que se presume podía haber sido asesinado en el mismo lugar donde lo encontraron, aunque restaban más pericias para confirmar esta hipótesis.