El pasado sábado Crucero del Norte tuvo su tercera presentación en el Andrés Guacurarí y otra vez cumplió con las expectativas. Dio vuelta un complicado partido ante Douglas Haig de Pergamino, al que derrotó por 2-1, y se mantiene en los puestos de vanguardia de la Zona 2 del Torneo Federal A.
Al finalizar el encuentro, el entrenador Miguel Salinas habló con la prensa y destacó la actitud del equipo para lograr torcer el marcador, pero sobre todo porque en el banco encontró la solución para cambiar la historia frente a un duro rival. Es que Catriel Weyreuter y Alex Garay, dos que ingresaron en la segunda mitad, fueron los autores de los tantos.
“En el primer tiempo se dio un partido raro, porque nos costó mucho y nos faltó convicción, pero en el segundo cambiamos la actitud y los chicos demostraron que están a la altura de las circunstancias. Estoy contento porque Weyreuter y Garay hicieron goles. Es muy importante que los chicos entren así y hoy demostraron que están a la altura de las circunstancias, pero lo más importante es que logramos los tres puntos”, sostuvo.
“Le ganamos a otro equipo duro, candidato. Creo que estamos yendo por buen camino y espero que podamos mantener esta regularidad”, agregó Salinas respecto al momento que está atravesando su equipo.
Más allá del buen presente del Colectivero, el entrenador mantiene los pies sobre la tierra y aseguró que el primer objetivo es mantener la categoría y después, dependiendo los resultados, se fijarán nuevas metas.
“Este año los clubes se armaron muy bien, con jugadores importantes. Va a ser difícil mantener un cierto nivel en todos los partidos. Por ahora apuntamos a quedar lejos de la zona de descenso y después, si nos metemos entre los ocho, vamos a ver para qué estamos”, sentenció el DT.
Por su parte, los protagonistas del triunfo hablaron y dejaron sus sensaciones por tener su bautismo de gol, pero siempre destacando lo colectivo por sobre lo individual.
“Fue un partido soñado para mí porque pude ingresar y hacer el gol, pero en realidad es secundario porque la verdad es que necesitábamos ganar en casa. Es sumamente importante porque ahora se viene una seguidilla de partidos y tenemos que estar preparados para encarar todo de la mejor manera”, afirmó Catriel Weyreuter.
Por su parte, Alex Garay también coincidió con su compañero de equipo. “Me tocó entrar y hacer el gol para dar vuelta el resultado. En lo personal me voy muy contento porque no venía jugando y el profe me dio la confianza. Sirvió para sacar adelante un partido duro y eso es lo importante”, sentenció.
Fue un triunfo muy festejado en Santa Inés por cómo se dio el partido, por poder reponerse del 1-0 en contra y sobre todo por la muestra de carácter, la misma que mostró ya en otros partidos, para dar vuelta historia con un hombre menos. Crucero se mantiene cuarto en el grupo y avisa que dará pelea en cualquier lugar que juegue.