Hace sólo siete meses, en agosto de 2021, el mundo asistía azorado a lo que ocurría en Afganistán, cuando el islamismo talibán derrocaba al gobierno moderado, surgido de la presencia estadounidense en el país, y retomaba el poder político después de dos décadas. Entonces, el mundo se juramentaba permanecer atento a todo lo que allí ocurriera, ante el previsible recorte de derechos para las mujeres (en realidad, para la sociedad toda, pero con especial virulencia sobre ellas) que cabía esperar del nuevo gobierno.
Parece mentira que haya transcurrido apenas poco más de un semestre. Pero en ese ínterin pasaron cosas. Y un drama humanitario como la invasión rusa en Ucrania “tapó” el drama humanitario precedente. Aprovechando que focos y flashes están ahora en Europa oriental, el Gobierno talibán avanza con su programa esperable pero indeseado.
Así, ayer entró en vigencia una nueva política de discriminación que establece la prohibición de que hombres y mujeres acudan juntos a los lugares de ocio y reserva ciertos días de la semana a cada género. “Los domingos, lunes y martes, las mujeres pueden visitar los parques de diversiones, siempre que usen hiyab (velo que cubre la cabeza) y los hombres tienen prohibido asistir en esos días”, sino que deberán hacerlo de miércoles a sábado. Además, las áreas turísticas de la provincia de Kabul estarán abiertas a las mujeres, pero deberán usar el hiyab completo “y evitar mezclarse con extraños y extranjeros”.
En cualquier caso, es sólo la última de una serie de restricciones emitidas en los últimos días por el Gobierno talibán, luego de que esta semana decidiera prorrogar el cierre de las escuelas para alumnas mayores de sexto año.
Las “dulcificadas” imágenes de talibanes jugando en autitos chocadores y prometiendo no recortar derechos poco a poco se van difuminando y no cabe duda de que, a la sombra de las bombas en Ucrania y lejos del radar del resto del planeta, terminarán por desaparecer del todo y dejar paso a la “vieja” versión del integrismo que tanto asustaba hace apenas medio año.