La confusión de los usuarios y demoras por cambios en la estación de Transferencia de Quaranta, se viene dando hace varios días por las variaciones en el ingreso y funcionamiento de los andenes. Estas modificaciones están vinculadas a la aplicación de la mano única de la avenida Santa Catalina, donde el recorrido de los colectivos se debe adaptar al nuevo sentido de la arteria.
Santa Catalina tendrá sentido de Norte a Sur, desde la avenida Urquiza hasta el final de su recorrido, en avenida Quaranta. Asimismo, la avenida Lavalle también tendrá mano única desde Quaranta hasta la costanera, en sentido de ingreso al centro de la ciudad, de Sur a Norte.
En la zona de la Estación de Transferencia Quaranta, los colectivos que ingresen por esa avenida -provenientes de la exruta 213, de Itaembé Miní, Itaembé Guazú-, van a poder hacer el giro a la izquierda para ingresar a la Transferencia. El resto de vehículos que van a transitar por Quaranta no van a poder hacer el giro a la izquierda en Santa Catalina, porque será de salida. Los colectivos de media distancia ingresarán por la calle Franklin, como lo hacen ahora para realizar el toque de andén.
De acuerdo a los datos a los que pudo acceder PRIMERA EDICIÓN, los recorridos de los colectivos se distribuirían entre ambas arterias sentido Sur- Norte sobre avenida Lavalle y sentido Norte – Sur sobre avenida Santa Catalina.
Por otra parte, dotarían de más servicios a la avenida Francisco de Haro, por lo tanto, la línea 07 y sus ramales tendrán parte de sus travesías de vuelta por esta avenida, quedando servicios troncales que cubren el corredor de Santa Catalina del mismo modo.
Con respecto a las paradas de transporte, actualmente se está realizando el reordenamiento de las mismas, colocándolas en su mayoría después del cruce de avenidas y las nuevas ubicaciones no excederían los 350 metros de distancia.
Opiniones de padres
Griselda Villalba, tiene dos hijos, uno que asiste al colegio Santa Catalina y otro al Instituto Politécnico San Arnoldo Janssen. “La verdad que las manos únicas, en cuanto a la fluidez con la que permite transitar son muy buenas, aunque el Gobierno puede transformar todas las avenidas e incluso hacer una autopista, pero si no cambia la cabeza de la gente, no vamos a lograr ninguna transformación. Hace falta educación vial y empatía por parte de los conductores”.
Consideró necesario que los paraguayos que ingresan a Posadas también sean informados, “porque muchos de ellos, están perdidos y podrían generar un accidente. Circulan muy rápido, no usan los guiños” y agregó que “si las avenidas tienen los semáforos bien sincronizados va a hacer un espectáculo”. Su hijo fue uno de los usuarios que observó la desesperación de muchas personas en la Estación de Transferencia, por los cambios que hicieron sin previo aviso.
Por su parte, María Da Cruz del barrio San Onofre, trae todos los días en colectivo a su hija de salita de 3 años, al colegio adventista. “Los chicos ingresan a las 14 y salen a las 17. Hasta esta semana el colectivo me deja frente a la escuela y me tomo para regresar del otro lado de la avenida. Ahora con estos cambios, cuando la traigo, debo caminar desde Lavalle. Va a ser difícil porque es pequeña, sobre todo los días de lluvia o frío”. Para el regreso, María no tendría inconvenientes porque tomará hasta Transferencia, tal cual como lo viene haciendo hasta ahora.
Gladys Kocur, también acerca a su hijo al Instituto Janssen y consideró que “será una cuestión de práctica y adaptación. Es más, estos días ya vengo por la calle Formosa, para tomar Santa Catalina. Ya estoy practicando”. Además, expuso que “sería muy bueno que cuente con ciclovías, porque muchos chicos vienen a la escuela en bicicleta”.
Expectativas
En el ámbito comercial hay cierto nivel de incertidumbre, sobre si las manos únicas generarían algún tipo de perjuicio o inclusive si podría ser más beneficioso para el sector.
María Emilia Ducrett, socia del Híper del Pollo, expuso que en particular para su empresa el tema no los tiene muy preocupados, ya que conversando con otros colegas que poseen sus comercios en avenidas donde ya se implementaron las manos únicas, “al principio estaban un poco preocupados porque les podría repercutir en sus ventas” pero no fue así. En este sentido, agregó que, “en los primeros días, hasta que la gente se adapte a la nueva disposición, se nota que cambia un poco el tránsito de gente, pero luego vuelve a la normalidad”.
En tanto, José Bentolila consideró que “no se puede saber si va a funcionar o no, mientras no se tenga una experiencia. Me parece válido probar, ir para adelante y luego corregir los errores. La objeción que tengo, es que los semáforos son en cuatro tiempos y no de tres. O sea, tenemos el mismo tiempo para pasar y las colas se hacen más largas”.
Bentolila destacó la rapidez con que se hicieron los trabajos de asfaltados. “Se pasó de tres o cuatro meses a una semana para asfaltar las calles de cada chacra”.