El Ministerio de Agricultura cerró el Registro de Declaraciones Juradas de Venta al Exterior para el aceite y la harina de soja. Lo hizo a través de un comunicado oficial el domingo dirigido al sector exportador. La suba histórica del precio de los commodities que ya impacta en los precios locales movilizó al Gobierno que busca intervenir y no descartó ninguna de las posibilidades. En este marco, el campo ya anticipa suba de retenciones y advirtieron en un comunicado las acciones a seguir.
“A raíz de las versiones que indican que el Gobierno nacional evalúa elevar las retenciones al trigo y el maíz, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias expresa su férreo rechazo y anticipa que no hay margen para que sigan expoliando a los productores”, comenzó el comunicado.
“Luego de que tuviera sanción en la Cámara de Diputados el acuerdo con el FMI, circulan versiones que indican que el gobierno de Fernández analiza tomar esta medida que perjudicaría una vez más, a los productores agropecuarios. En este escenario, la CEEA rechaza cualquier intención de aumento de retenciones, así como también cualquier otra intervención distorsiva en los mercados”, agregaron.
“Como venimos sosteniendo, no solucionan ninguno de los problemas existentes, no combaten ni la inflación ni la pobreza; por el contrario suman malestar y perjudican a los productores agropecuarios y traerían consecuencias negativas, porque van en contra de todo lo que se necesita: una mayor producción, más inversión y más trabajo. De hecho, estos rumores no hacen más que acrecentar la ya enorme incertidumbre que tiene el sector agropecuario, lo cual impacta negativamente en nuestra actividad y en definitiva, en la economía nacional”, insistieron.
“No hay más margen para manoseos ni para seguir expoliándonos como sector, ni avasallándonos. Los productores de todo el país no permitiremos ni dudaremos en defender nuestros derechos como lo hicimos hace 14 años, exactamente un día como hoy”, recordaron. El 11 de marzo de 2008, se firmó la resolución 125 que imponía restricciones móviles y que derivó en la mayor protesta del campo durante cuatro meses.
Por su parte, el presidente de la Federación Agraria Argentina, Carlos Achetoni, aseguró ayer que la suspensión de las exportaciones de harina y aceite de soja “es un mal indicio y una mala señal para todo el sector”.
“Nos sorprendió la decisión del Gobierno de cerrar el registro de exportación de harina y aceite de soja. No sé si es legal, creo que esa medida debería pasar por el Congreso, pero están buscando algo para evitar el debate parlamentario, donde podríamos dar batalla”, sostuvo el dirigente.
Los dos principales derivados de la molienda de soja pagan derechos de exportación del 31% y, según trascendió, el Gobierno podría subir esa alícuota al 33%.
Con un aumento de las retenciones, el Estado nacional podría recaudar U$S 400 millones anuales extra, estimóAchetoni.
El titular de Federación Agraria resaltó que las entidades que conforman la Mesa de Enlace están “con contacto permanente” y dijo además: “Obviamente vamos a generar las instancias necesarias (para resistir esta medida). Los productores están muy alterados”.
El anuncio de Cerruti
En medio de la discusión por la suba de retenciones, Gabriela Cerruti, portavoz de Alberto Fernández, aseguró que el Ejecutivo no está pensando en cobrarle más impuestos a la producción de maíz, soja y trigo. Sin embargo, no adelantó nada de lo que sucederá con los otros productos apuntados.
“Se están estudiando medidas, ninguna es la suba de retención a la producción de maíz, soja y trigo. Tenemos que entender que las consecuencias económicas de la guerra ya llegaron a la Argentina y la preocupación del Presidente es detener estas subas de precios que hay que entender en un contexto mundial”, afirmó en diálogo con periodistas.
De esta forma, el Gobierno buscó cortar de raíz los rumores sobre un aumento de las retenciones en los principales granos, que originó una suerte de bola de nieve que terminó con una amenaza de Juntos por el Cambio de no respaldar el acuerdo con el FMI y la preocupación de los gobernadores peronistas por el avance de la supuesta medida.
Los mandatarios de Córdoba, Juan Schiaretti, y Santa Fe, Omar Perotti, habían apuntado contra el Gobierno nacional durante el fin de semana por la suspensión de harina y aceite de soja, medida que se mantiene. En Balcarce 50 reconocen que podría aumentar el precio de ambos productos, pero aún no está definido.
Mientras tanto, productores autoconvocados advirtieron que están dispuestos a movilizarse en caso de que el Ejecutivo avance con un cambio de esquema. Desde el domingo están dialogando para definir las medidas de fuerza.
Parte del arco político también cuestionó la medida
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y los gobernadores de Santa Fe, Omar Perotti, y de Córdoba, Juan Schiaretti salieron a criticar la decisión del Gobierno nacional de suspender los registros de exportaciones de harina y aceite de soja.
Rodríguez Larreta sostuvo que es una “pésima noticia el cierre de exportaciones de aceite y harina de soja, así como el potencial aumento de retenciones”.
“Sólo diez días después de haber prometido que no harían nada de esto, el Gobierno demuestra que su palabra no tiene valor y hace exactamente lo mismo que dijo que no iba a hacer”, expresó el mandatario porteño de Juntos por el Cambio.
Por su parte, el gobernador Perotti, fustigó la decisión del Gobierno nacional al advertir que “frenará el ingreso de divisas al país”.
Tras conocerse la medida tomada por el Ministerio de Agricultura de la Nación, el mandatario justicialista advirtió que “se debe tener cuidado con incentivar la desindustrialización”.
En tanto, el peronista federal Schiaretti expresó: “En relación al cierre de las exportaciones de harina y aceite de soja, rechazo esta medida porque perjudica la producción cordobesa y va en contra del ingreso de divisas que son necesarias para nuestro país”.
Fuente: Agencias de Noticias y Medios Digitales