La ola de calor y la sequía potenciada por la falta de lluvias en la región está perjudicando gravemente a la ganadería en todas sus formas y esta situación podría generar varias consecuencias: pérdida de peso de los animales, disminución del stock, malventa de la hacienda y hasta un aumento en los precios de la carne. Los efectos pueden ser diversos de acuerdo al tipo de ganado.
En este sentido, en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, el presidente de la Sociedad Rural de Ovinos, Caprinos, Equinos y Porcinos de Misiones (SROCEP), Gabriel Montiel, fue tajante: “La situación que vive Misiones es sumamente crítica“, dijo.
El productor remarcó que la realidad del día a día en el campo se ha vuelto muy dura, potenciada por la falta de agua y los grandes incendios que dejan los campos sin pasto y a los animales flacos. “Uno mira sobre todo en la Zona Sur, que es una zona un poco más pedregosa como en Profundidad, Cerro Corá, Fachinal, San José o Cerro Azul, y en los campos lo que se ve es piedra, están totalmente secos“, dijo.
El empresario advirtió que toda esta situación podría indefectiblemente acarrear un aumento en los precios. “Habrá menos producción, en los Mercados Concentradores prácticamente ha caído la venta y la exposición de productos para que la gente pueda comprar. Toda la cadena primaria de la producción está severamente afectada“, indicó
Por otra parte, comentó además que hay graves problemas de abastecimiento de agua, tanto para el consumo humano como para los animales. Esto acarrea grandes movimiento para acceder a fuentes de agua, lo cual implican a su vez seguir sumando costos a los productores que desde hace tiempo vienen penando por las sequías.
Por esta situación, y ante la declaración en diciembre de la emergencia agropecuaria en Misiones, el Gobierno de la provincia emitió un paquete de créditos blandos por $150 millones de pesos con el objetivo de asistir a entre 1.000 y 1.200 pequeños productores agropecuarios. “Pero no todo se arregla con un subsidio, tenemos ir buscando la forma de ver cómo nos vamos a preparar para los años que vienen”, señaló Montiel.
Para el productor esta situación que se viene repitiendo desde hace tres años se extenderá en el tiempo. “Este año es el más grave de todos con la falta de agua. De 1.800 milímetros por año hemos perdido este año más del 35% de agua“, alertó.
Por esta razón, planteó empezar a buscar un cambio cultural en lo que hace al trabajo en el campo. “Vamos a tener que aprovechar las circunstancias de cuando la tierra esté verde, retener lo que produce el campo y almacenarlo para aguantar estas temporadas secas”, dijo.
“Después recurrir a los organismo públicos, como el Ministerio del Agro para que nos enseñen cómo almacenar agua natural como para que podamos juntar el líquido y de esa manera poder pasar estos tiempos de crisis”, agregó.
“Nosotros como productores tenemos un problema cultural, y es que esta zona de clima subtropical siempre ha sido muy generosa en cantidad de agua, y toda esa agua que antes había que correr, ahora estamos pensando cómo hacer para almacenarla”, agregó.
Actualmente, la Provincia impulsa la construcción de vertientes en las chacras como un sistema sencillo y de bajo costo, que soluciona en parte la falta de agua. “Son todas las cosas que vamos a tener que hacer porque sino en la producción vamos a tener todos los años este mismo problema”.
Por su parte, el productor ganadero Matías Chamula, señaló que “estamos atravesando una situación complicada porque debido a la emergencia hídrica, la pastura no brota y está muy seca, por ende los animales no tienen alimento, y se debe invertir en balanceado. Sumado a que se están secando las aguadas naturales, y por eso no podemos hacer rotaciones en los potreros porque muchos no tienen caudal de agua”, explicó.
Todos los animales perdieron peso no sólo por las pasturas secas, sino también por las altas temperaturas y la escasez de agua. Frente a este panorama crítico, “cualquier ternero que tiene las defensas bajas, se muere. Mientras que las vacas que no tienen el peso adecuado tampoco se preñan, por eso escasearán los terneros próximamente”, explicó.