Luego de tres subas del dólar minorista en las últimas dos semanas, se podía pensar en esta tendencia. No obstante, fue necesario esperar a ver un mayor movimiento del tipo de cambio mayorista, regulado por el Banco Central (BCRA) y fundamental para las operaciones de comercio exterior, para que llegara la confirmación.
Luego de siete ruedas durante el mes de diciembre, la aceleración en la devaluación del peso se ratificó. En este sentido, Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio, indicó: “En la semana que acaba de finalizar el tipo de cambio mayorista avanzó 39 centavos, contra los 36 de suba registrados en la semana previa, transformándose en el ajuste semanal más importante desde el registrado en la última semana de abril de este año”.
“El BCRA finalmente empezó a acelerar el ritmo de depreciación del tipo de cambio oficial: la variación diaria anualizada se aceleró desde 20% a principios de noviembre hasta 35% en el promedio de la última semana, y pasó de deslizarse a un ritmo mensual promedio del 1% a avanzar al 2,5% mensual”, aseguran desde la consultora Equilibra.
Cabe mencionar que el dólar oficial terminó la semana en $101,55 y todavía tendría que ganar 0,84% en lo que resta del mes para cerrar el año en $102,40, que es el nivel que proyectó Martín Guzmán en el Presupuesto 2021.
El objetivo: reducir la brecha
Los expertos en economía esperaban una aceleración en la devaluación del peso, que a su vez ayudara al BCRA a empezar a cerrar la brecha cambiaria “por abajo”. Luego de las elecciones y de los resultados obtenidos por el Gobierno, el propio presidente del organismo, Miguel Pesce, anticipó que el ritmo del tipo de cambio iba a modificarse.
Al cierre del viernes, la distancia entre el dólar mayorista y el dólar blue -que bajó $4 en la semana- fue de 93,5%. Así, se alejó del 106% que llegó a superar antes de las legislativas. Cabe recordar que, mientras negocia un nuevo programa, la reducción de esa brecha es uno de los resultados que el Gobierno quiere mostrar ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De todas maneras, la devaluación todavía no empata con el resto de los precios de la economía. “El dólar mayorista pasó de deslizarse a un ritmo mensual promedio del 1% a subir a una velocidad bastante mayor, cercana al 2,5% mensual, en un contexto en el que la inflación mensual aún no baja del 3%”, puntualiza el informe de Equilibra.
En este escenario, Guzmán ya tiene la decisión tomada sobre la evolución del dólar “oficial”: habrá una aceleración del “crawling peg” (minidevaluaciones diarias). Pero ese ritmo no irá por encima de la inflación. La idea es que empareje a la suba del índice de precios.
De todas formas, advierten fuentes oficiales, no habría que esperar una aceleración más notoria, al menos hasta que se rubrique el acuerdo con el FMI.
Los funcionarios no lo dicen pero un cambio de estrategia requeriría de un ajuste alcista de las tasas de interés. Algo que el FMI dio cuenta en su comunicado pero que el Gobierno, por ahora, resiste.
Equilibra apuntó que “en caso de optar por la aceleración del crawling peg para salir del actual esquema de retraso cambiario, el BCRA deberá subir la tasa de interés para que a los agentes económicos no les convenga endeudarse en pesos para posponer exportaciones, lo que agudiza la escasez de divisas en el mercado oficial”.
¿Qué pasa con las reservas?
Pese a la suba más rápida del tipo de cambio mayorista, el BCRA vendió unos u$s160 millones en lo que va de diciembre y sus reservas quedaron cerca de perforar nuevamente el piso de los u$s41.000 millones.
En este sentido, GMA Capital apuntó que aumentar la devaluación sin subir las tasas -tal como pidió el FMI- podría terminar por agudizar el drenaje de reservas. “Si efectivamente el dólar oficial emprendiese un camino de actualización similar al de la inflación, con la tasa en pesos corriendo al 2,8% mensual, los productores agropecuarios tendrían incentivos a endeudarse en moneda local, optar por financiarse y no liquidar los granos”, explicó.
Finalmente, agregó: “En tanto, a los importadores les convendría tomar crédito para adelantar pagos de bienes importados. La actuación simultánea de estas dos fuerzas agudizaría el drenaje de reservas del BCRA, a menos que exista una suba en la tasa de interés”.
El dólar ahorro supera los $177
El dólar blue cotizó este lunes estable y se consigue a $196,50 en cuevas del microcentro porteño.
De esta forma, el precio todavía se mantiene lejos del récord del jueves 11 de noviembre, día en que llegó a tocar los $207.
En este contexto, los inversores miran con atención la evolución de las cotizaciones bursátiles del dólar.
Por caso, el dólar Bolsa, o MEP, se ubicó en torno a los $198,05. En tanto, el dólar contado con liquidación cotiza a $203,32.
Por su parte, en el segmento mayorista, la divisa estadounidense transcurrió la rueda a $101,54 siempre bajo la atenta mirada del Banco Central (BCRA).
En el mercado oficial minorista, la moneda norteamericana operó a un promedio de $107,37 en agencias y bancos de la city porteña, por lo que el dólar ahorro, que se calcula con el recargo del 30% del impuesto PAÍS más el 35% del impuesto a las ganancias, se vende alrededor de los $177,05.
Camilo Tiscornia, director de CyT Asesores Económicos, aporta que, además de que en esta época del año es muy común que suceda una baja del dólar blue en la medida que la gente y las empresas suelen necesitar pesos para realizar pagos, “es posible también que esté incidiendo una mejora de la expectativa respecto de las conversaciones para cerrar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI)”.