El proyecto de ley de VIH, Hepatitis, Tuberculosis e ITS, que busca reemplazar la antigua Ley Nacional del Sida (23.798), tuvo dictamen y quedó habilitado para ser tratado en Cámara de Diputados.
Esta nueva ley otorgará un giro de acción social y salud para el desarrollo de políticas vinculadas a los derechos humanos y garantías para el fortalecimiento al acceso a salud pública.
Este jueves la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados lo aprobó con 33 firmas, con 5 disidencias parciales. El proyecto ya se trató en la Comisión de Acción Social y Salud Pública de la Cámara de Diputados, que dio dictamen favorable el 6 de octubre de este año.
“En los últimos 40 años, desde que se descubrió el VIH, hubo muchísimos avances científicos que han permitido que podamos vivir con VIH y tener una mejor calidad de vida. Lo que la ley vigente todavía no tiene es el abordaje social del VIH, que proteja a las personas en el ámbito laboral y educativo, y que proporcione una protección de los derechos humanos, en general”, le dijo Matías Muñoz, presidente de la Asociación Ciclo Positivo.
En números
Según el último Reporte Epidemiológico de la Dirección de SIDA, ETS, Hepatitis C y TBC, actualmente viven en el país 136.000 personas con VIH positivo, aunque se estima que un 17% lo desconoce, y desde hace varios años se detectan alrededor de 5000 nuevos casos anuales, de manera sostenida.
Además, el número estimado de personas con infección por hepatitis C en el país es de 332.000, de las cuales sólo el 35% fueron diagnosticadas, de acuerdo con datos del informe Las hepatitis B y C bajo la lupa, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
En cuanto a la tuberculosis, según datos oficiales, durante el 2019, se notificaron 12.499 casos, de los cuales el 78% se diagnostican en la población en edad productiva (20 a 44 años).
Qué establece el proyecto
El proyecto incorpora las hepatitis virales, infecciones de transmisión sexual (ETS) y tuberculosis, y establece que las personas que padezcan estas enfermedades pueden jubilarse a los 50 años de edad y acceder a pensiones no contributivas, en caso de percibir remuneraciones por debajo del salario mínimo vital y móvil, aunque tengan trabajos en relación de dependencia.
El objetivo del texto es declarar de interés nacional a los medicamentos, vacunas y productos médicos para el tratamiento de estas enfermedades y prevé la utilización de las salvaguardas de salud incluidas en el Acuerdo sobre los Aspectos de la Propiedad Intelectual vinculados con el Comercio (ADPIC), ya que muchas veces las patentes se convierten en barreras para el acceso a la salud.
También, contempla la participación activa de las personas afectadas en la elaboración de los lineamientos para el diseño e implementación de las políticas públicas, en cumplimiento de los tratados internacionales suscriptos por el país, y propone la creación de una comisión nacional interministerial e intersectorial de asesoramiento en VIH, hepatitis virales, otras ITS y tuberculosis, así como de un observatorio nacional sobre el estigma y la discriminación.