Garantizar el derecho a la tierra para que los habitantes puedan vivir, trabajarla y producir es una tarea muy compleja. El Gobierno provincial viene desarrollando un programa al respecto, que tiene el objetivo de corregir y solucionar una situación irregular que padecen muchas familias misioneras hace décadas.
La decisión política “es afrontar el problema y brindar respuestas definitivas, que no sean simples parches, invirtiendo millones de pesos en la compra de lotes para brindar seguridad jurídica, tranquilidad y garantías a las familias. Nunca antes se había tomado el toro por las astas”, explicaron a PRIMERA EDICIÓN desde la Gobernación.
Para fin de año está prevista la regularización de unas 4.000 propiedades en distintos municipios del interior, principalmente en la zona del Alto Uruguay, que es la que concentra la mayor parte de las ocupaciones en propiedades fiscales y privadas.
El gobernador Oscar Herrera Ahuad ordenó la continuidad del trabajo iniciado por su antecesor, Hugo Passalacqua, en el sentido de aportar recursos propios y rescatar expedientes incompletos que han dormido durante décadas en diversas oficinas o papeles que se encuentran en tenencia de las familias ocupantes.
La subsecretaria de Tierras, Sonia Melo, explicó que el principal inconveniente es la informalidad y el desconocimiento de los trámites. “Desde el año pasado a ahora nos pusimos en el trabajo de llevar adelante las mensuras” y dejando 4.000 expedientes listos para avanzar con la titulación definitiva en fin de año.
“Una de las principales y primeras dificultades es la desinformación y el desconocimiento de las cuestiones que tiene que ver como continuar con un expediente. Solamente celebró un boleto de compra y venta de una mejora y con eso cree que tienen terminado total y absolutamente el expediente, dice esta es mi tierra, tengo el título y no es así, esa es una de las principales dificultades”, expresó.
El trámite incompleto abre lugar después a numerosas disputas judiciales donde siempre termina interviniendo el Estado, la mayoría de las veces, en favor y defensa del más débil, tenga o no la razón. Es que muchas veces, las compras son efectuadas “de buena fe” y el comprador desconoce los antecedentes de la tierra que está comprando. Hay innumerables situaciones donde se presentan dos, tres o más dueños de una misma parcela y todos son compradores “de buena fe”.
Para el Gobierno misionero “la tierra es un tema sensible que afecta la proyección de vida de las familias. Es un tema sensible y troncal, porque pasa por la cuestión del arraigo, el afianzamiento de una familia, la proyección, los sueños, la consolidación de toda una historia de vida y los proyectos hacia sus hijos, nietos”, dijo Melo.
Por cada trámite hay que mensurar, mirar papeles, revisar: “tenés horas de trabajo, yo digo de laboratorio, en la cuestión del análisis del expediente, del armado, de la continuidad, del seguimiento y sobre todo tener en cuenta, también, el compromiso de la misma familia”, añadió.
En este sentido la funcionaria expresó que desde el año pasado están trabajando y se han firmado convenios con los colegios profesionales de Agrimensura y Notarial para avanzar en el proceso del acceso a tierras, con mensuras y el título de propiedad para lograr una tarifa social plana en la intervención de los mismos.
“El último trámite es la formalización del título, es por eso que desde del año pasado a ahora no se llevan adelante las mensuras, que es lo que estaba faltando para avanzar, y se está trabajando en nueve municipios esperando a fin de año con todos esos planos aprobados se tendrán alrededor de 4.000 expedientes listos para empezar la titularización definitiva”, sostuvo.
Por último, la funcionaria graficó la sensación que vive una familia cuando cae en la cuenta que la tierra que pisa es definitivamente suya: “la emoción y la felicidad de una familia al recibir su título representa la certeza del objetivo alcanzado y significa que estamos llevando verdaderas soluciones a las familias misioneras. Siempre tienen el sueño de lograr el arraigo y una proyección de vida”, finalizó.