Escuela, ese espacio que indefectiblemente en algún momento de la vida se siente propio, que agiganta cualquier sentido de pertenencia y que lleva a celebrar sus aniversarios con particular emoción. Como la Capital de la Madera, que el pasado 3 de julio recordó los primeros sesenta años de la Escuela 453.
Fue la primera institución educativa en la zona urbana y su edificio albergó la incubación de otras instituciones educativas, como la Escuela Primaria 380, la Escuela Normal Superior 13 y hasta las primeras reuniones de la comisión vecinal que buscaba la municipalización de esa localidad.
El historiador, licenciado Marcelo Albarracín hizo una recopilación de datos de su surgimiento y su concreción, en 1961. Comenzó a funcionar en el edificio de la oficina de la delegación de tierras y bosques del Gobierno provincial. Según los libros históricos, “una vez conseguida la fundación de la escuela que tenía el número 53 se pasó a formar la Comisión proedificio. Para lo que recibió del consejo provincial 120.000 pesos”.
La escuela pionera en ejido urbano se creó a mediados de 1960 y se le asignó el número 53.
Albarracín transcribe parte del libro histórico de la escuela donde revela su inicio. “Los años pasaron y los colonos que veían crecer a pasos agigantados la colonia y que sus hijos quedaron sin tener una escuela seguían con la idea fija”.
Con el paso de los años cambió dos veces de número, en 1978 pasó a ser 1053. Y en 1981, Escuela Provincial 453 como lo es hasta hoy. Lo que nunca cambió fue su nombre, “Escuela Sierra Grande”, porque está enclavada en el centro de la sierra que atraviesa la columna vertebral de la provincia.
“Los colonos que se afincaban en la zona de ‘El Cruce’ o ‘Sesenta’, como llamaban a ese paraje, buscaban hacía muchos años la creación de una escuela para sus hijos”, destacó el historiador e insiste en que “la idea de una escuela en lo que es hoy San Vicente ya comenzó a gestarse en 1953, cuando se realizó una reunión en la casa de Guillermo Campos, en la que se labró un acta que tenía forma de carta para enviar a Posadas y formalizar el pedido”.
Una vez que consiguieron que el Gobierno provincial establezca la creación de la escuela, los vecinos se reunieron para formar la primera comisión proedificio, en enero de 1961.
En el libro histórico está plasmado quienes fueron los que encararon esa gesta. Fueron designados como presidente, Ricardo Rauschenbach, y otros integrantes de la comisión fueron Carlos Torres, Benjamín Cardozo, Eduardo Asame, Osvaldo Kibscher, Luis Bos, Pedro Alegre, Salvador Sifriano, Fernando Rodríguez, Salvador Valdez y Víctor Miroski.
Para el comienzo de las clases del año 1961 los vecinos consiguieron que la oficina de la delegación de tierras y bosques cediera el edificio por tres meses, hasta que se concretara el que iban a hacer en el predio que siempre ocupó y que está en la intersección de la avenida Libertador, Abel Siñuka y Guillermo Campos.
Casualmente el primer edificio se levantó en la parte trasera del predio, hoy calle Guillermo Campos. Una construcción de madera aserrada en la laminadora de la empresa Ortmann y Tejeda. Años más tarde se concretó otro edificio, sobre la ruta nacional 14, hoy avenida Libertador.
Para que funcione una escuela hacía falta docentes. Albarracín transcribe del archivo histórico: “El Consejo de Educación traslada desde la Escuela 76 al maestro Carlos A. Rodríguez, quien ejerció como director, y a su esposa Carolina A. M. de Rodríguez como maestra de grado; luego se sumaría Lidia E. de Montejano”.
Así, comenzaron a funcionar el 3 de julio de 1961 en el edificio de la delegación local de tierras y bosques, ubicada en el cruce de las rutas nacional 14 y provincial 212; hoy avenidas Libertador y Constitución. Pero en 1962 la Escuela 53 inicia las clases en su edificio de madera que la comisión promunicipio construyó sobre una calle terrada, que hoy lleva el nombre de Guillermo Campos.
El edificio no estaba terminado y los constructores improvisaron puertas y ventanas. Este segundo año viene con novedades, por la cantidad de chicos, se suman más docentes. Entre ellos destacamos a Francisca Marmelich, Teodora Kusik de Silke y Elsa Montejano.
Además, se celebró por primera vez un acto patrio en la ciudad de San Vicente. El 25 de mayo, y contó con la presencia de docentes, alumnos, padres y vecinos que se congregaron para participar.
Esta fue la institución madre de la educación en la Capital Nacional de la Madera. En su edificio se gestaron nuevas instituciones, como la Escuela Provincial 240, que hoy lleva el número 280; y el Bachillerato Polivalente 17, actualmente Escuela Normal 13.
Pero lo más interesante fue que a finales de la década del 60 e inicio del 70 comenzaron a reunirse en el predio los vecinos que buscaban y gestaban la municipalización de San Vicente; que se concretó en el año 1978 y que se consumó en febrero de 1979.
En el libro histórico también están los primeros egresados. En 1963 recibió su diploma de culminación de estudios María Rauschembach, un año después Pedro Venialgo y Eduardo Gallardo. En 1965 Víctor Kachinski, Albino Miroski, Miguel Bóveda, Rosalina Carballo y Rosalina Asamé; en 1966, Saúl Martínez, Juan Kachinski y Alba Serra. En 1967 fueron catorce alumnos y para el año 1969 veinte egresados, lo que demostraba también el crecimiento de la población de San Vicente año a año.
Hoy la Escuela 453 “Sierra Grande” cuenta con una matrícula de casi mil alumnos distribuidos en dos turnos. Por la noche el edificio alberga a la Escuela de Adultos 1227. Su Director es el profesor Ramón Avelino Dutre y su vicedirectora la profesora Catalina Gladys Megera, con un plantel docente de 46 maestros, profesores y áreas especiales.