Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a lo largo de la historia, los juegos y los deportes han ayudado a la humanidad a sobrevivir en tiempos de crisis al reducir las ansiedades y mejorar la salud mental. Si bien el brote de coronavirus ha obligado a la mayoría de las actividades deportivas y de juego a reducirse, el ajedrez ha demostrado una notable resistencia, adaptabilidad y un poder de convocatoria muy fuerte en tiempos de pandemia.
En los últimos meses se ha duplicado el interés general en el ajedrez, con más jugadores que nunca para participar en eventos de ajedrez a través de plataformas en línea.
Al mismo tiempo, la ONU considera al “deporte-ciencia” como un “juego de alcance mundial que promueve la equidad, la inclusión y el respeto mutuo, y en ese respecto puede contribuir a la creación de un entorno de tolerancia y comprensión entre los pueblos y las naciones”, teniendo en cuenta que “cualquier persona, en cualquier lugar, lo puede jugar ya que trasciende las barreras del idioma, la edad, el género, la capacidad física o la situación social“.
La oficialización del 20 de julio como Día Mundial del Ajedrez es muy reciente, ya que fue proclamado por la Asamblea General de la ONU el 12 de diciembre de 2019, para conmemorar la fecha de la fundación de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) en París en 1924.
No obstante, por iniciativa de la FIDE, el 20 de julio ya era observado como el Día Internacional del Ajedrez por los ajedrecistas de todo el mundo desde 1966.