Después de nueve días de internación en el Hospital Madariaga de Posadas, el ministro de Salud Pública, Oscar Alarcón, fue dado de alta este martes pero deberá continuar con el tratamiento para superar el coronavirus y sus potenciales secuelas.
Según fuentes consultadas por PRIMERA EDICION, Alarcón está bien y ya respira sin dificultad pero aún sigue dando positivo para COVID-19. Vale recordar que el funcionario es paciente de riesgo pues tiene una cardiopatía e incluso, hace algunos años, fue intervenido del corazón y se le colocó un marcapasos luego de sufrir un infarto.
Tras dar positivo de COVID-19, Alarcón fue diagnosticado con neumonía por lo que se lo trató con suero equino. También su esposa estuvo internada por coronavirus.
Hasta que pueda regresar a sus funciones al frente del Ministerio de Salud Pública, los subsecretarios de ese organismo lo reemplazan en sus funciones al frente del Consejo Federal de Salud (COFESA), en el comité de crisis o en la negociación con los gremios de los trabajadores del sector.
Presidente del IPS, recuperado del COVID
El médico y presidente del Instituto de Previsión Social (IPS), Lisando Benmaor, ya superó el COVID-19 y, según anticipó a PRIMERA EDICION, planea regresar hoy al IPS porque ya fue dado de alta, “voy a ir aunque sea un rato porque si bien no tuve síntomas fuertes durante los once días que estuve aislado, sí me quedé con una sensación de cansancio fenomenal (astenia)”, contó.
Al igual que Alarcón, tenía las dos dosis de la vacuna hace ya varios meses.