Tras la publicación de PRIMERA EDICIÓN sobre la réplica de dispositivos electrónicos que hace Camilo Furlan, un hijo de Cerro Corá, sin conexión a Internet segura y sin computadora, tanto Camilo como el paraje en el que vive, Villa Venecia, recibieron ayuda como conexión a Internet para él y el paraje y también para el centro de Cerro Corá, así como varios obsequios que lo ayudarán a seguir replicando elementos útiles para trabajar en la chacra.
Camilo es un chico más de una colonia de Misiones. Vive en el Paraje Villa Venecia y es alumno de la EPET 46 de Cerro Corá. Como todo adolescente de 15 años tiene la inquietud de explorar en Internet.
Muchos jóvenes de esa edad buscan juegos o relacionarse con otros por las redes sociales, pero él investiga y reproduce dispositivos electrónicos que puede implementar en la chacra para favorecer el trabajo de su padre, de él y su hermana.
“Estamos muy agradecidos por lo que se pudo conseguir para nosotros, la comunidad de Villa Venecia y Cerro Corá”, dijo Camilo a este medio.
En la nota publicada en PRIMERA EDICIÓN, se contó, además de lo que hace Camilo, las condiciones en las que lo hacía, la dificultad en sus investigaciones por la falta de conectividad y de una computadora.
Eso sensibilizó a mucha gente que se comunicó con él, como los directivos de la empresa estatal proveedora de Internet, Marandú Comunicaciones, la Escuela de Robótica y la Fundación Ferrocarriles del Nordeste Argentino.
A partir de entonces se abrieron las puertas a una nueva etapa en la chacra de los Furlan, en el paraje de Villa Venecia y en Cerro Corá.
En la chacra de los Furlan, la empresa Marandú Comunicaciones instaló una conexión a Internet con 43 megas gratis para el uso libre de la comunidad. También en el centro de Cerro Corá el municipio tiene que instalar la conexión de Wifi en la plaza del centro.
Con Internet se puede mejorar mucho en la chacra, asegura Camilo.
“La conectividad tiene la practicidad del acceso a Internet que antes teníamos restringido. Lo hacíamos con un teléfono y buscando señal en el potrero o bien cuando salíamos de la chacra. Lo que más nos ayudó es que antes apuntábamos lo que teníamos que buscar cuando teníamos señal y ahora ya buscamos. Nos da una oportunidad por varios factores: el trabajo en la chacra se está volviendo más técnico y esas cualidades requieren una búsqueda de información por parte del colono. Con Internet en su chacra pueden hacerlo en forma automática como lo estamos haciendo nosotros ahora con el punto de Internet Villa Venecia”, indicó.
Escuela de Robótica
Pero no quedaron ahí las repercusiones de la nota. También se acercaron desde la Escuela de Robótica, lo inscribieron como alumno, le entregaron un kit de robótica y también tienen la intención de abrir un aula satélite en Cerro Corá para que pueda dar clases.
“Estamos agradecidos por todos los beneficios que tuvimos, sentimos que somos privilegiados por contar con Internet en la chacra y una computadora para poder investigar mucho más y mejor. Este beneficio lo tendrían que tener todos los chicos de las colonias de Misiones para poder estudiar e investigar. También para poder incorporar más cosas técnicas a la chacra a partir de las investigaciones que se pueden hacer con una conexión segura. Nosotros lo estamos implementando, antes con la conexión de Wifi precaria que teníamos y ahora mucho más con esta nueva conexión. Logré hacer un sensor de humedad del suelo, y estamos construyendo un electrificador para el potrero y un sensor para la bomba de agua. Ya estamos viendo otros dispositivos y otros programas que podemos implementar en la producción. También los colonos pueden ver las distintas producciones que pueden hacer en sus chacras y las técnicas, eso es mejorar la vida del colono y hacer que el productor se quede en la chacra que es el mensaje que queremos dar con esto”, reflexionó Camilo.
La computadora que le faltaba
También se comunicaron con la familia Furlan desde la Fundación Ferrocarril del Nordeste Argentino. “Se comunicó con nosotros la señora Lorena Colazo Bidagain de la Fundación Ferrocarril del Nordeste Argentino y nos preguntó qué necesitaba Camilo para mejorar sus investigaciones. Les contamos que una computadora porque la que le dieron desde Conectar Igualdad en el colegio se la robaron a los tres meses de tenerla. Entonces nos prometieron una computadora y vinieron a la chacra a conocer a Camilo y a traernos la computadora”, contó el padre de Camilo, Juan Carlos Furlan.