El presidente brasileño Jair Bolsonaro, un aliado de Donald Trump, evitó criticar a los partidarios de su par estadounidense que este miércoles invadieron el edificio del Congreso y se mostró comprensivo con las acusaciones de fraude electoral que motivaron los desmanes.
“He estado siguiendo todo” lo que acontecía en Washington, dijo el mandatario ultraderechista a la entrada de su residencia oficial en Brasilia a simpatizantes que lo interrogaban al respecto.
“Usted sabe que estoy vinculado a Trump y sabe cuál es mi respuesta. [Hubo] muchas denuncias de fraude, muchas denuncias de fraude”, agregó, refiriéndose a los comicios presidenciales estadounidenses del 3 de noviembre, en los cuales el demócrata Joe Biden derrotó al republicano Trump.
Trump nunca reconoció ese resultado y convocó a una protesta que derivó en los disturbios de este miércoles, cuando el Congreso se disponía a certificar la victoria de Biden.
Bolsonaro, que llegó al poder con un discurso antisistema similar al de Trump, reiteró además su convicción de que en su propia elección en 2018 “hubo fraudes” para evitar que ganase en la primera vuelta.
Bolsonaro, llamado el “Trump tropical”, fue el último de los líderes del grupo de potencias industrializadas y emergentes del G20 en felicitar a Biden por su victoria.
Países tradicionalmente aliados de Estados Unidos instaron el miércoles a Trump y sus partidarios a dejar de cuestionar las elecciones con acusaciones de fraude sin presentación de pruebas.
El primer ministro británico, Boris Johnson, denunció “escenas vergonzosas” y exhortó a una “transición pacífica” del poder. Y el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, instó a los seguidores de Trump a “dejar de pisotear la democracia”, añadiendo que “las palabras incendiarias se convierten en acciones violentas”.
Fuente: medios digitales