La provincia de Corrientes sufre por estos días en el ámbito sanitario a raíz del coronavirus y a modo de estadística ya superó la barrera de los 4 mil infectados por esta enfermedad desde el inicio de la pandemia. Esto va a causar, según afirman varios especialistas de la sanidad, un inminente colapso del sistema sanitario correntino.
En las últimas 24 horas, la vecina provincia tuvo 116 positivos, con los que superó los 4 mil casos de COVID-19; con 817 pacientes con el virus activo y 56 de ellos internados en el hospital de Campaña.
A raíz de ello, la 89.3 FM De las Misiones, dialogó hoy con el médico correntino y ex diputado nacional Fernando Marcópulos. El galeno en la actualidad trabaja en Santa Fe, pero manifestó su preocupación por el sistema de salud de su provincia natal.
“El sistema de salud en Corrientes está con una crisis de larga data, más que crisis es una decadencia de muy larga que dejó postrado a todo el personal sanitario en una de las pobrezas más grandes”
A lo que añadió, “Ahora lo que nos está llamando la atención y está sacando a la luz este estado de pandemia, este pico de pandemia que tiene tres muertos por día, es que el resto de la salud pública está quedando a la buena de Dios”.
En otro tramo de la charla, el médico se mostró muy duro contra el actual titular de la cartera sanitaria de Corrientes, Ricardo Cardozo. Remarcó que “hay una falta de organización, una desidia del sistema terrible porque no hay una organización adecuada del sistema. Hay un problema que tiene que ver con poner cabeza y esfuerzo por parte del ministro de Salud Pública, en organizar un sistema que de respuestas”.
También remarcó que puntualmente lo que le llama la atención es la dificultad que tiene cualquier paciente de la comunidad en acceder al sistema de salud cuando no es un paciente COVID-19.
Además, reseñó que dentro del hospital del Campaña que funciona en la capital provincial también hay problemas graves, pero tiene que ver más que nada con el tema de organización.
Dijo que “en la clínica privada no te aceptan si no tenés un hisopado COVID negativo y tuvimos problemas con riesgo de vida de pacientes que no pudieron entrar al sistema, salvo por ‘cuña’ de funcionarios de segundo nivel”.
Por otra parte, al ser consultado sobre el impacto que tuvo esta pandemia en los propios médicos, enfermeros y todo personal de la sanidad, Marcópulos reflexionó y comentó que “eso es histórico, acá el abandono de la salud pública es histórica. Los enfermeros acá en Corrientes cobran 15 mil pesos, pero además tienen que pagarse el monotributo porque están tercerizados. Así nadie trabaja bien, ni cómodo”.
“Sin embargo, hay mucha voluntad, hay mucho esfuerzo. Porque cuando uno está en la trinchera no se puede esconder. El médico, el enfermero, el personal de salud da la cara, pone el cuerpo y está poniendo todo su voluntad, pero si no tiene el respaldo de un sistema que esté organizado”, añadió en esa línea.
En medio de esta falta de organización y anarquía existente, al parecer, en el sistema sanitario de salud de Corrientes, ¿Quién debería tomar el mando?, se le preguntó al médico correntino que acto seguido y sin dudar dijo que “hoy yo lo hago responsable directamente al ministro de Salud”.
En la misma línea, dijo que “acá el que se tiene que poner las pilas es el ministro. El paciente COVID-19 no debe moverse de su casa; la ambulancia debe ir a buscarlo. El paciente no sabe si tiene o no la enfermedad, por ello tiene que haber un sistema que detecte eso y actúe adecuadamente”.
“No está funcionando esto, pero tenemos todo en Corrientes; lo que está faltando es que alguien, el aceite de esta maquinaria, ayude a que funcione esta maquinaria; y ese aceite de la maquinaria depende de la cabeza, el único que puede ponerle aceite a la maquina es el maquinista, en este caso el ministro de Salud Pública”, ejemplificó.
El médico se mostró muy dolido por la actual situación sanitaria en Corrientes y también contó que sus advertencias y enojos llegaron a oídos del propio ministro y al parecer no le contestó de muy buena manera, a través de las redes sociales. “Hay una respuesta, mala, pero respuesta al fin por parte del ministro, que vía Facebook me comentó así como una ‘brabuconada’, que me iba a explicar cuando quiera y donde quiera”, contó.