El feedback sobre el rendimiento y la actividad que desarrolla cada uno es esencial para el crecimiento y la mejora de cualquier grupo u organización, sea que hablemos de familia, empresa, club o iglesia entre muchos otros.
No obstante, a veces cuesta proporcionarlo de manera eficiente, porque son conversaciones incómodas de esas en las que nos preocupa herir sentimientos o romper relaciones.
Para abordar estas conversaciones constructivamente y llegar a buen puerto les propongo pensar en este pasaje de la cultura del feedback a una cultura de conversación. En este tránsito hay tres aspectos fundamentales a tener en cuenta: el objetivo, el enfoque y el lenguaje.
Tradicionalmente el objetivo de dar feedback es evaluar lo que otra persona hace, generalmente acompañado de un sermón y una crítica. En cambio la propuesta de “conversar” persigue este objetivo de mejorar el rendimiento, producir una acción y lograr juntos un resultado.
Con el modelo tradicional de dar feedback, el enfoque es “_Yo tengo la verdad, sé como se hacen las cosas, soy el sabelotodo, te ordeno, te culpo, arreglalo. En cambio, el enfoque de la conversación es cuidarnos para crear una relación de colaboración, el problema es “nuestro”.
Finalmente, el lenguaje que se utiliza tradicionalmente al dar feedback es peligroso, solapado, confunde hechos y opiniones y suena a amenaza. En cambio la conversación usa un lenguaje seguro, expresado en mensaje yo: “Lo que no funcionó para mi es…, desde mi mirada es…”.
Cuando alguien recibe feedback de la manera tradicional siente amenazados varios aspectos: sus resultados (no soy efectivo, no soy suficiente); sus relaciones (no encajo, no estan satisfechos); sus competencias (no soy bueno, soy insuficiente).
Esta emocionalidad genera estrés, miedo, ansiedad afectando el desempeño, el clima laboral y el rendimiento, obteniendo un efecto adverso al que queríamos lograr.
¿Estás preparado para pasar de la “cultura del feedback” a la de “conversar para mejorar el rendimiento”? En el próximo artículo te cuento cómo podes hacerlo.